El Ministerio de Interior y Transporte tiene lista una resolución que amplía la capacidad de control y gestión del Estado sobre los dos concesionarios de trenes que siguen en pie: Ferrovías y Metrovías. Las empresas de los grupos Emepa y Roggio tienen bajo su órbita la concesión de los ferrocarriles Belgrano Norte y Urquiza, respectivamente. Según pudo saber Página/12, el objetivo del ministro Florencio Randazzo es redeterminar dentro de los próximos 90 días los montos que reciben esas empresas para la explotación de los servicios y así limitar la discrecionalidad con que operan. Además, en los próximos días Interior y Transporte iniciará una auditoría integral sobre América Latina Logística, una empresa del grupo brasileño Camargo Correa. La decisión representa el paso previo para terminar con la concesión de la red de carga que opera la compañía.

Desde que se desplazó a TBA de la operación de trenes después de la tragedia de Once, los únicos dos contratos de concesión que restan renegociar son los de Ferrovías y Metrovías. En Interior y Transporte explican que “en lugar de renegociar se van a readecuar los contratos para cambiar los parámetros de regulación y el mecanismo de transferencia de fondos para la explotación”. Para eso, la resolución que será publicada en el Boletín Oficial en los próximos días crea una comisión mixta entre la Subsecretaría de Gestión Administrativa del Transporte, la Secretaría de Transporte y la Secretaría de Interior, que se tomará 90 días “para revisar esos contratos y readecuarlos en función de una mayor capacidad de gestión y control por parte del Estado”. La medida “limitará el margen de maniobra” y “ordenará situaciones irregulares”, explicaron a este diario fuentes oficiales.