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El gobernador bonaerense Daniel Scioli resaltó la “preocupación compartida con los docentes por recuperar los días de clases” perdidos tras 17 días de paro, al inaugurar el ciclo lectivo 2014 en la provincia. En ese marco, confirmó que la directora general de Educación, Nora De Lucía, “va a estar trabajando con los gremios (del frente provincial) para la recuperación de los días perdidos”. Scioli anticipó que con De Lucía “tenemos por delante una agenda muy intensa con los gremios porque compartimos la misma inquietud, pero también para trabajar en la agenda educativa y la conectividad, tratemos de hacer un esfuerzo”.

En un acto en la escuela Dardo Rocha de La Plata –que fue gravemente afectada durante la inundación de 2012 y en la que cursó sus estudios primarios la presidenta Cristina Fernández de Kirchner–, el gobernador envió un “saludo muy especial a los 3 millones y medio de chicos que hoy están en nuestras aulas y, para los más de 300 mil docentes, mi reconocimiento y respeto por su vocación social y por la responsabilidad que tienen al frente de cada aula de llevar adelante el sistema educativo más grande de Latinoamérica”. El mandatario bonaerense remarcó: “Saludamos también a los 7 millones de padres que hoy normalizan su vida cotidiana, al poder llevar a los chicos al colegio para poder estar a pleno en sus responsabilidades cotidianas”. Y además pidió poner “todos juntos la fuerza y la energía en tener cada día más y mejor educación”.

Scioli destacó que su actitud frente al conflicto fue la de una “administración responsable”, y detalló que el aumento “ronda el 30,9 por ciento, es el promedio que encontramos dentro de un contexto socioeconómico que requiere del esfuerzo de todos, acompañando las políticas de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner”. Y reiteró, al finalizar la recorrida por las escuelas, que “junto a la comunidad educativa, vamos a trabajar para recuperar los días de clase perdidos”, porque “seguiremos discutiendo calidad educativa y contenidos, pero con los chicos en clase”.

Por su parte, De Lucía prometió “garantizar los 180 días de clase” y por ello anticipó que para poder alcanzar los días perdidos elevarán al Consejo General de Educación (CGE), que se reunirá el jueves, “una propuesta para que las jornadas institucionales y de capacitación provincial se transformen en áulicas”. En tal sentido, en la cartera educativa bonaerense comenzaron a sesionar técnicos de los gremios docentes y subsecretarios.

Durante los 17 días de paro hubo fuertes cruces verbales entre el gobierno y los gremios, medidas administrativas y judiciales para frenar los paros –conciliación obligatoria y amparo–, una multitudinaria movilización a la Casa de Gobierno y cuatro ofertas salariales rechazadas. Incluso la Defensoría del Pueblo bonaerense intentó mediar en el conflicto, aunque sin éxito. Luego del confuso episodio en que una funcionaria casi fue apedreada, Scioli dijo que el paro docente tenía “trasfondo político”, aunque no aclaró a qué sector se refería, y apuntó contra el jefe de Suteba, Roberto Baradel. El día anterior este dirigente había advertido que si tocaban “un solo peso del salario de los maestros los vamos a ir a buscar a cada lugar de la provincia”.

El conflicto recién comenzó a destrabarse la semana pasada, cuando la provincia dispuso mejorar la oferta de aumento del 30,9 por ciento en dos cuotas y elevarla hasta el 38,7 por ciento, la que fue aceptada el sábado por la mayoría de los gremios. El Frente Gremial Docente, compuesto por Suteba, FEB, UDA, Amet y los privados de Sadop, aceptaron la oferta, y sólo el moyanista Udocba la rechazó y sigue con paro por tiempo indeterminado.