EL PAíS › PROTESTA POR LOS BALAZOS CONTRA JUAN ARREDONDO
Doce piqueteros detenidos
Doce piqueteros del Movimiento de Desocupados de Solano, entre ellos siete menores, fueron detenidos por la policía camino a una protesta para repudiar el ataque sufrido por su compañero Juan Arredondo, quien la semana pasada fue baleado frente a la municipalidad de Lanús. Las detenciones fueron denunciadas por los manifestantes como un episodio más de hostigamiento en su contra. Quedó un chico detenido, el único a quien los policías acusaron de “generar desórdenes”. El menor se llama Joaquín Ramírez, y casualidad de casualidades, es hermano de Agustín Ramírez, víctima de la policía en el segundo gran caso de gatillo fácil que hubo en la zona después de la masacre de Ingeniero Budge.
Los desocupados iban en un colectivo de línea desde Solano a Lanús, para participar de una nueva protesta frente a la intendencia. “La semana pasada habían hablado con la empresa de transporte para que los dejaran viajar gratis, a lo que la empresa accedió, con la condición de que subieran por tandas para no abarrotar las unidades”, detalló el abogado de la Correpi Sergio Smietniansky. Sin embargo, a la altura de Monte Chingolo un inspector subió a uno de los micros y tras comprobar que había pasajeros sin boletos llevó el vehículo a la comisaría octava. Allí se produjeron los maltratos de rigor: a las mujeres las bajaron de los pelos y a una le pegaron una trompada, denunciaron los desocupados.
Los piqueteros reclaman el pago de planes de empleo aprobados hace dos meses, que todavía no cobraron. La semana pasada, con la manifestación en la que fue baleado Arredondo, lograron la firma de un nuevo compromiso. Debían cobrar los planes a partir de hoy, pero el feriado bancario lo impidió.
El chico detenido, Joaquín Ramírez, relató a su abogado que los policías lo acusaron de estar armado. Él lo negó, hubo forcejeos con la policía y lo llevaron dentro de la seccional. Una vez allí la policía comprobó que no tenía ningún arma, pero lo acusó de desórdenes por lo que ahora tendrá que pasar por una indagatoria. Su hermano Agustín, víctima del gatillo fácil, trabajaba con la iglesia en Quilmes, en temas vinculados a los problemas de vivienda. La audiencia del menor fue fijada por el Juez de Paz de Lanús, Rodolfo Natiello.