EL PAíS
El dilema con el Fondo
Por M. Z.
De acuerdo con Economía, la única complicación importante que podría generar la postergación del canje de deuda sería que la superposición de esa operación con la reanudación de las negociaciones con el FMI terminen perturbándose mutuamente. Si bien todavía no está acordada la fecha de reinicio de las negociaciones por un acuerdo que fue suspendido unilateralmente a mitad de año por el gobierno argentino, se presume que la misión del FMI llegaría al país en medio del ahora demorado proceso de canje. “Aunque en teoría el simple hecho de que estemos con el canje en marcha debería ser un elemento tranquilizador para el Fondo, me temo que van a aprovechar la situación para endurecer su posición”, dijo uno de los encargados de tratar con los auditores que responden a Rodrigo Rato. Con el Presupuesto 2005 ya aprobado, es decir con el superávit fiscal primario ya determinado, la discusión central con el Fondo va a pasar por el flujo de pagos y desembolsos entre el organismo y la Argentina. Desde que el acuerdo quedó suspendido, la Argentina siguió cumpliendo con el cronograma de vencimientos, tanto con el FMI como con el Banco Mundial y el BID, cancelando un total aproximado a 2000 millones de dólares. En Economía pretenden que una vez aprobado el cumplimiento de las metas de la revisión que quedó suspendida, el FMI devuelva la mayor parte de los desembolsos efectuados desde entonces. El conflicto potencialmente más explosivo se origina en que, si el Fondo se niega a devolver lo cobrado, Kirchner y Lavagna quedarían enfrentados al siguiente dilema: dejarla pasar mostrando debilidad o plantarse firmes amenazando con un default justo cuando estarían tratando de salir de otro default.