EL PAíS › PAUL O’NEILL, SECRETARIO DEL TESORO, MODERO CRITICAS
Ahora se siente satisfecho
El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Paul O’Neill, pasó de una declaración tan irritante y reveladora del pensamiento del gobierno estadounidense como la que hizo anteayer, cuando sostuvo que “Argentina se quedó esperando en vano que la fueran a rescatar”, a otra de tono más diplomático y no menos cínica. Ayer expresó su “satisfacción” por “ver al Presidente y a todos los gobernadores exponer su intención de emprender acciones serias”. El funcionario emitió un comunicado para corregir sus últimas impresiones sobre la dirigencia argentina, luego de haberla denostado ante la renuncia de Jorge Remes Lenicov.
El cambio de posición de O’Neill fue simétrico al del gobierno de Eduardo Duhalde, que de insinuar una ruptura con el FMI terminó declarando con entusiasmo que cumplirá todas y cada una de las demandas del organismo. Lo hizo en el acuerdo de 14 puntos que firmó con los gobernadores, donde se promete, entre otras cosas, la modificación a la Ley de Quiebras, la derogación de la Ley de Subversión Económica, la firma de acuerdos bilaterales entre la Nación y las provincias para especificar cómo harán el ajuste fiscal y la aprobación de una nueva ley de coparticipación de impuestos.
Todo ello a O’Neill le pareció “la expresión de un espíritu de cooperación nacional”. Sin embargo, el funcionario insistió en que la Argentina debe cumplir las exigencias del FMI antes de aspirar a ayuda internacional. “Queremos ver que tengan éxito en la implementación de las acciones en los períodos de tiempo indicados”, añadió el secretario del Tesoro en el breve comunicado que emitió ayer. Los enunciados generales que presentaron Duhalde y los gobernadores en el documento son insuficientes para O’Neill, aunque igualmente se mostró “complacido” por el gesto de “querer tomar acciones serias”.
Desde el FMI, uno de sus voceros señaló a la agencia EFE que el organismo “considera como un avance el nuevo acuerdo” entre el gobierno central y las administraciones provinciales, pero no hará valoraciones adicionales sobre la situación política generada tras la renuncia de Remes Lenicov. El informante se negó a precisar si el Fondo enviará una nueva misión negociadora en mayo, tal como estaba previsto. “Sigue siendo una posibilidad, pero no es definitiva”, indicó.
Todavía tiene que definirse quién será el ministro de Economía y cuál será la política económica de aquí en más. De hecho, ayer se debatía sobre la conveniencia de anclar el tipo de cambio, como pretendía Duhalde hasta mediados de esta semana. Con tantas indefiniciones, el Fondo esperará antes de decidir si continúa con las negociaciones o no. O’Neill, por lo pronto, volvió a la rutina de declaraciones retóricas de apoyo y negación de cualquier ayuda concreta.