EL PAíS
EE.UU., república bananera
“La única razón por la que Tennessee no se parece ya mismo a la Argentina es porque no es una nación soberana”, escribe el economista Paul Krugman en un demoledor ataque contra el “oportunismo irresponsable” de varios gobernadores norteamericanos, cuyos estados se conducen como “repúblicas bananeras”, y del propio George W. Bush, luego de que las proyecciones fiscales para 2002 pasaron de un superávit de 150 mil millones a un déficit de 165.
Krugman detalla el caso de New Jersey tras la “contabilidad creativa” que desplegó en su gestión Christie Whitman para justificar reducciones impositivas. Según un estudio titulado “Coge el dinero y huye”, el gobierno estadual dejó de aportar a sus fondos jubilatorios, lo cual mejoró el aspecto del presupuesto. A cambio abrió un tremendo agujero financiero, para llenar el cual Whitman indujo a esos fondos a tomar plata prestada y timbearla en la Bolsa, con tan mala suerte que...
Ahora los contribuyentes de Nueva Jersey deben cubrir pérdidas por 22 mil millones de dólares, lo cual equivale a la recaudación de más de un año. Sin embargo, estados como Tennessee y Alabama no andan mejor. En el primero, el año pasado se estudiaba un aumento de impuestos, pero algunos comentaristas radiales soliviantaron a la opinión pública, desatando disturbios que abortaron el alza. Sin dinero, la mitad de los empleados públicos fueron suspendidos. De allí el parecido con la Argentina.