ESPECTáCULOS
La patada prohibida
Fanático declarado del fútbol, hincha ferviente de River, Guerra tiene prohibido patear una pelota para no perjudicar su carrera, pero encuentra similitudes entre sus dos amores: “Tanto en la danza como en el fútbol, hay disciplina, entrenamiento riguroso, intensidad muscular, resistencia física, pasión. El fútbol tiene mucho de tango: la rabona, pasitos, juegos con los pies. El jugador tiene encuentros físicos, choques. El bailarín, también: cuando te viene una mujer corriendo, te salta encima y la tenés que levantar, si no la agarraste bien, te pegó una piña que te dejó tirado en el piso, o te rompió la nariz, como me pasó a mí. El fútbol y la danza son actividades hechas en equipo, dirigidas por alguien desde afuera, que transportan el placer de uno hacia al público. Ojalá que cuando deje la danza, se arme un grupo con amigos y podamos ir a jugar una vez por semana”.