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Como no hubo pedido de rescate, no puede decirse que se trate de un secuestro extorsivo. Lo cierto es que un chico de 10 años, que salía de la escuela en un barrio de la localidad de Bella Vista, partido de San Miguel, fue raptado por un hombre que se trasladaba en un vehículo. El menor fue liberado a cuatro cuadras pues –se supone– su captor se habría asustado al advertir la presencia de un patrullero.
El hecho ocurrió pasadas las 17.30, después de que el chico saliera de la Escuela Nº 13 del Barrio Obligado, en Bella Vista. Según informó un vocero de la Fiscalía de San Martín, el niño estaba parado en una esquina, esperando a unos amigos para regresar a su casa, cuando fue abordado por el conductor de un auto, quien lo invitó a subir a su vehículo con el pretexto de llevarlo hasta su casa.
El menor –se trata de un niño de condición social humilde– accedió a subir, pese a que no conocía al individuo. Según relató después, su captor no estaba armado y lo trató correctamente. En forma sorpresiva, a las pocas cuadras de haber subido, el hombre lo obligó a bajar y lo abandonó en la vía pública.
“En su testimonio, el menor dijo que vio policías en una esquina, por lo que se supone que su captor se habría asustado”, especuló ante este diario el vocero de la Fiscalía.
El menor volvió a su casa y le contó a su padre lo que había ocurrido. De inmediato, ambos concurrieron a la comisaría local a radicar la denuncia. Allí, el chico no pudo describir el modelo del auto en que había subido. Hasta el momento, tampoco hay testigos que puedan aportar ese dato. El menor volvió a su casa sin haber sufrido un solo rasguño. El caso, de todas formas, fue calificado como “privación ilegal de la libertad”.