Un comerciante de 54 años fue asesinado de seis balazos al resistirse a que un grupo de delincuentes intentaran robar en un almacén del partido bonaerense de Moreno. Por el crimen fue detenido un adolescente de 17 años, según informaron fuentes policiales. El hecho ocurrió el sábado por la noche, en un almacén ubicado en Marcos del Bueno y Perú, en el barrio Las Catonas, de Moreno, en el noroeste del conurbano, donde trabajaba la víctima, Juan Carlos Miranda, de 54 años.

Todo comenzó alrededor de las 21.10, cuando el comercio estaba por cerrar al público y Miranda atendía el sector de la carnicería. En ese momento, seis jóvenes irrumpieron en el almacén, amenazaron al comerciante y le exigieron que les entregara todos los elementos de valor, pero Miranda intentó resistir.

“Hubo un forcejeo y se traban en lucha con la víctima”, explicó un jefe policial que participa de la investigación, e indicó que ante la resistencia uno de los asaltantes extrajo un arma de fuego y atacó a tiros al comerciante, que recibió seis impactos de bala.

“Hubo mucha saña. La víctima presentaba tres tiros en el pecho, otro en una mano y los restantes dos en la espalda”, precisó el investigador consultado. Los peritos tienen otra percepción, y sostienen que una posibilidad es que Miranda recibiera los primeros cuatro disparos de frente, esos impactos lo hicieron girar y por ese motivo recibió los otros dos de espalda al tirador.

Tras los disparos, los asaltantes se apoderaron de algunos valores que había en el comercio y escaparon del lugar a la carrera. Los investigadores, que describieron que los asaltantes actuaron con “mucha saña”, creen que el sospechoso aprehendido es el autor material de los disparos, aunque no explicaron en qué pruebas se basaban, ya que en su poder no tenía ninguna arma de fuego.

En tanto, un vecino alertó a la policía de lo ocurrido por un llamado al 911, por lo que los efectivos de la comisaría de Las Catonas arribaron a la escena del crimen poco después. Los policías constataron que Miranda ya estaba muerto a raíz de las heridas de bala y se entrevistaron con los testigos que aportaron datos sobre las características físicas y de vestimenta de los delincuentes.

En base a esa información, poco después, los detectives determinaron que en un pool cercano al almacén asaltado había un joven que respondía a las características descriptas, por lo que se trasladaron hasta ese lugar y lo apresaron. Los voceros policiales indicaron que el sospechoso es un adolescente de 17 años, y creen fue el autor material de los disparos que mataron al comerciante. Sin embargo, en poder del chico no se secuestró ninguna arma de fuego, aunque los pesquisas sospechan que se descartó de la misma tras huir del almacén. De todos modos, no queda clara la insistencia policial, ni en qué se basaron para detenerlo, y mucho menos se informó si el muchacho estaba en el pool con intenciones manifiestas de ocultarse o si estaba jugando, lo que lo ubicaría en dos situaciones extremadamente opuestas ante la sospecha.

El joven quedó a disposición de la Justicia de Menores de Mercedes, mientras los policías realizaban distintos operativos en busca de más pistas sobre la banda. Los investigadores aseguran que los delincuentes son todos jóvenes, probablemente menores de edad, agregan ellos, y que podrían estar ocultos en la zona.

Los vecinos de la víctima se mostraron hoy doloridos y preocupados por lo ocurrido. “Era una persona terriblemente trabajadora. Hacía 12 años que estaba en el almacén”, dijo una ex empleada del comercio. “Ya le habían robado antes. Pero no tenía miedo”, agregó la mujer entre lágrimas.

Una vecina que vive al lado del almacén contó que Miranda “tenía esposa e hijos y que trabajaba con todo el grupo familiar, que es excelente”.

El homicidio del almacenero es investigado por personal de la comisaría 1ª y de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 10 de Moreno, a cargo de Juan Antonio Minetto.