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Río Negro podría convertirse hoy, si su Legislatura lo aprueba, en la primera provincia argentina en permitir la Unión Civil para personas del mismo sexo. El proyecto, presentado por la diputada provincial Regina Kluz (Frente Grande), da a las parejas homosexuales los mismos derechos y obligaciones que la legislación provincial establece para la totalidad de las parejas convivientes, exceptuando la posibilidad de casarse y adoptar hijos. A diferencia de la ley aprobada la semana pasada en la ciudad de Buenos Aires, el proyecto no establece la creación de un registro de uniones civiles para formalizar la convivencia.
“Luego de mucha discusión llegamos a la conclusión de que crear un registro era una forma de discriminar, de estigmatizar a la gente que se debe anotar allí. Por eso, decidimos, sin más vueltas, equiparar a la pareja homosexual con los concubinos. Es decir, que a partir de ahora, tanto los heterosexuales como homosexuales que quieran dejar asentada su unión de hecho y gozar de todos los beneficios que esto acarrea, deberán cumplir con los mismos requisitos”, explicó a Página\12 la diputada Kluz. Estos requisitos son, según la legislación provincial, presentar ante el Juzgado de Paz una declaración jurada, avalada por dos testigos, que certifique que la pareja lleva conviviendo por dos años como mínimo.
La declaración jurada les permitirá a las parejas gays ejercer todos los derechos y obligaciones que prevé la legislación provincial para los concubinos, tales como inscribirse como parejas para el acceso a planes oficiales de vivienda, beneficios recíprocos en la obra social estatal, licencias por atención de familiar para los empleados públicos, y el ingreso a áreas restringidas hospitalarias si la pareja está internada.
“No hablamos de matrimonio ni de adopción, porque son temas del Código Civil, sobre los que la Legislatura provincial no tiene injerencia”, aclaró la diputada, quien posteriormente enumeró los límites de su proyecto de ley. Así, no podrán formalizar la unión los menores de 18 años, los incapaces, los que tengan un lazo familiar directo –hermanos–, los que estén casados con una persona del sexo opuesto o los que hayan declarado una unión de hecho anterior.
Si bien, por su extensión a nivel provincial, la ley tendrá mayor impacto que la promulgada en Buenos Aires, no se espera en Viedma una expectativa similar a la generada en la ciudad días atrás. Tanto el oficialismo como la oposición anunciaron en su mayoría su voto afirmativo, y la Iglesia rionegrina, a través de los años, ha demostrado una posición muy abierta con respecto a estos temas. De hecho, en Río Negro desde hace cuatro años que existe una ley de Salud Reproductiva, y su legislación contempla la realización en hospitales públicos tanto de ligaduras de trompas como de vasectomías.