Durante más de nueve horas fue interrumpida la circulación de trenes de la ex línea Roca por una medida de fuerza de trabajadores ferroviarios tercerizados que realizaron un corte sobre las vías a la altura de Avellaneda. Reclamaban la “reincorporación de cien trabajadores despedidos” y “el pase a planta permanente” de otros 1500. El corolario de la jornada fueron los disturbios en la estación Constitución, donde pasajeros demorados apedrearon a la policía y provocaron destrozos. Ante la “falta de respuestas”, los empleados en conflicto se reunirán nuevamente hoy para evaluar cómo continúan el plan de lucha.

A las 11 comenzó la protesta, protagonizada por cerca de cuatrocientos trabajadores de empresas tercerizadas por la concesionaria Unidad de Gestión Operativa Ferroviaria de Emergencia (Ugofe). Uno de los manifestantes explicó que había “más de 1500 trabajadores tercerizados cobrando la mitad de sueldo que los compañeros efectivos, hay despidos y persecución sindical a todos los que se organizan”. Así transcurrieron las horas a pocos kilómetros de la estación Constitución mientras los empleados esperaban novedades por parte del organismo titular de la concesión vial.

La empresa Ugofe, que tiene la concesión del ramal, radicó la denuncia en un juzgado de Quilmes, que ordenó el desalojo de las vías. La policía se presentó en el lugar del conflicto, donde se vivieron momentos de tensión, pero finalmente los trabajadores desbloquearon el paso de los trenes al coincidir con el inicio de las negociaciones con la Subsecretaría de Transporte Ferroviario. Ante el reclamo de carácter gremial, el secretario general de la Unión Ferroviaria, José Pedraza, deslindó responsabilidades a través de un comunicado en el que aseguró que “las personas involucradas en este conflicto no son representadas gremialmente” por la organización, a la vez que sostenía que era “completamente ajena a los hechos que están perturbando el normal funcionamiento de la Línea Roca”.

Pero el paso de trenes duró poco y luego de una asamblea al costado de los rieles, los trabajadores volvieron a bloquear las vías. A esa altura ya eran miles los pasajeros que se encontraban en la estación Constitución esperando la llegada de formaciones para regresar a sus casas. Cerca de las 20.30, al tiempo que los manifestantes anunciaban la suspensión de la medida de fuerza, se produjeron incidentes dentro del edificio refaccionado y fue allí cuando grupos de pasajeros que llevaban horas esperando comenzaron a romper vidrieras, boleterías y oficinas, además de arremeter contra agentes de la Policía Federal que se habían apostado junto a los andenes. Llovieron piedras, botellas y tachos de basura hacia la zona con protección policial y contra las oficinas de la empresa Ugofe. El saldo de la reyerta fue de una mujer policía con heridas y al menos cuatro detenidos.

“Ya habíamos hecho conocer nuestro reclamo a los usuarios, por eso nos retiramos”, explicó Walter Quinteros, trabajador de la empresa de limpieza de estaciones ferroviarias Ecocred. Al no haber obtenido ninguna respuesta oficial ni de la empresa, los trabajadores despedidos se reunirán nuevamente hoy, a las 17, en una asamblea para definir cómo continúan con el reclamo.