Fueron detenidos los tres acusados por abuso sexual contra una adolescente de 14 años en General Villegas. Se trata de Mario Magallanes, José María Narpe y Mariano Piñero, quienes habrían registrado su propio delito en un video que fue difundido por redes de celulares. El delito se habría cometido a fines de 2009 y tomó estado público en mayo. Ya entonces el fiscal pidió su detención, que fue trabada por sucesivos recursos de sus abogados. Están imputados de “abuso sexual agravado, corrupción de menor y difusión de material pornográfico”. Los tres pertenecen a la sociedad establecida de General Villegas, y cuando fueron imputados, grupos de vecinos se movilizaron para defenderlos y denigrar a la víctima.

El juez Gerardo Palacios Córdoba, de Trenque Lauquen, dictó la orden de arresto, que se cumplió ayer a mediodía. Anoche, los imputados permanecían en la comisaría de Villegas, a la espera de ser trasladados al juzgado en Trenque Lauquen para ser indagados.

Los acusados estaban en libertad como consecuencia de sucesivos pedidos formulados por sus abogados ante el juez Palacios Córdoba y ante la Cámara de Casación Penal bonaerense; cuando esas solicitudes fueron rechazadas, interpusieron un pedido de eximición de prisión ante la Cámara de Apelaciones, que hace quince días no hizo lugar y devolvió el caso a Palacios Córdoba.

La joven había sido registrada practicando sexo oral a tres hombres: éstos habían grabado ellos mismos las escenas con un celular y lo habían difundido entre los habitantes de la localidad de General Villegas, en el interior de la provincia de Buenos Aires. Las imágenes habían llegado a diseminarse incluso en la escuela a la que concurría la chica. El padre de una alumna denunció la existencia del video y la Justicia inició una investigación por distribución de material pornográfico.

Como consecuencia de la investigación, el fiscal Fabio Arcomano acusó a Narpe, de 28 años; Magallanes, de 24; y Piñero, de 29. Magallanes se presentó acompañado por su esposa. Esta fue una de las personas que organizaron una marcha para pedir “justicia” pero en favor de los tres acusados. La movilización convocó a unas 200 personas, en su mayoría familiares y amigos de los imputados. Por entonces Blanca Lescano, la madre de la adolescente abusada, manifestó que “tenemos miedo, vergüenza y bronca”.

En su momento, diversas instituciones locales –la Sociedad Rural, el Rotary Club, iglesias de distintos credos, cámaras empresarias y aun organizaciones sindicales– coincidieron en un comunicado que calificaba “lo ocurrido” –sin usar la expresión “abuso sexual”– como “totalmente repudiable” y sostenía que estos problemas se evitan “en el seno de la familia”. La familia de la víctima recibió amenazas telefónicas, cuyo origen llegó a ser detectado por la Justicia. “Déjense de joder con las denuncias”, decía la voz anónima. Por lo demás, el video había circulado durante meses en la comunidad local, sin que nadie hiciera la denuncia por la evidente participación de una menor de edad en actos sexuales con adultos. En la filmación, los tres hombres aparecen riéndose mientras abusan de la adolescente.

Ayer, Luis Correa, abogado de la familia de la víctima, sostuvo que “hubo gente que atacó a la chica abusada, que dijo cosas espantosas y difamó sin límites. Tengo la orden de la familia de ir por ellos ahora, porque son situaciones que no se deben permitir. Pediremos que cada uno de los que atacó a la víctima y comprometió su integridad tenga que dar cuenta de sus dichos”.