Al menos tres personas entraron ayer al departamento de la conductora de televisión Mirtha Legrand, en el barrio porteño de Palermo, luego de maniatar al conserje del edificio. Los ladrones ingresaron con llaves, fueron directamente al departamento de la conductora y, como si supieran dónde buscar, robaron una caja fuerte con dinero y joyas. “Mi casa la encontré toda revuelta pero fueron directamente donde estaba mi caja de seguridad”, afirmó la víctima. Antes de huir, llevaron una computadora con las imágenes de las cámaras de seguridad del lugar.

El episodio comenzó en la madrugada del domingo, alrededor de las 2, en un edificio situado en Avenida del Libertador al 2800, casi esquina Scalabrini Ortiz. Tres hombres “bien vestidos” entraron al edificio con llaves, luego se acercaron al encargado y le dijeron que se trataba de un asalto. “Eran verdaderos profesionales”, dijo la conductora. Curiosamente, ni Legrand ni sus empleados domésticos estaban en el departamento al momento del robo. “Yo no estaba en casa. Estaba en Victoria (Entre Ríos). Al encargado lo maniataron con armas pero entraron en 15 minutos y se llevaron muchísimo”, dijo la víctima. También agregó: “Destruyeron las tres cámaras de seguridad de abajo, no se pueden ver los físicos, ni cuántos eran, ni cómo eran”. Mirtha estuvo ausente desde el sábado y se enteró de lo ocurrido “por la radio”.

La propia conductora reconoció que los delincuentes subieron directamente al cuarto piso, donde reside la “diva de los almuerzos”. No forzaron la entrada al departamento, por la cocina, y usaron llaves para ingresar. Una vez en el interior, al encargado “lo tuvieron en la cocina mientras uno le apuntaba”, según contó Legrand y agregó que fueron directamente al lugar donde guardaba las joyas, como si supieran.

Los ladrones se llevaron, según las fuentes, la caja fuerte en la que había una importante suma de dinero en pesos –no precisaron la cifra– y joyas, algunas de las cuales estaban en un cajón del mismo ropero en el que estaba guardado el cofre, sin amurar. “Se llevaron una cantidad de cosas, dinero, alhajas. De todo. Las alhajas eran casi todas regalos de mi marido, que tienen un valor sentimental muy grande”, precisó.

La conductora subrayó que los delincuentes “sabían dónde estaba todo”, en el cuarto de vestir: “Mi casa la encontré toda revuelta pero fueron directamente donde estaba mi caja de seguridad”, afirmó. Con el botín, los ladrones bajaron al hall y previo a la huida tomaron el CPU de una computadora ubicada detrás del mostrador en el que se guardan las imágenes tomadas por las tres cámaras de seguridad que funcionan en el edificio para no ser identificados. Luego, escaparon.

Un vecino notó movimientos extraños en el edificio y alertó a la seccional 53ª. Al llegar, los policías se encontraron con el encargado, que les narró lo sucedido. Fuentes policiales confirmaron que los tres ladrones, que actuaron a cara descubierta, no se llevaron ningún otro elemento de valor del departamento y que tampoco entraron a robar al de otro vecino. “Yo el viernes anuncié en televisión que me iba, así que sabían que la casa estaba sola”, contó.

Para los investigadores policiales, la información precisa del lugar, de su ausencia prolongada y la posesión de las llaves apunta la lupa hacia algún entregador cercano. Mal que le pese a Mirtha, un problema de inseguridad privada en su entorno. El desorden en el interior del departamento lo generaron en lugares puntuales y no forzaron nada. “No puedo sospechar de nadie, toda la gente que me rodea es absolutamente de confianza”, señaló luego de relatar que los asaltantes ingresaron con llaves y sin forzar las puertas. Legrand manifestó: “Espero que investiguen e investiguen bien” porque, sostuvo que “no es un robo cualquiera, fue muy importante, no eran rateritos”.

“Todos podemos ser víctimas, nadie está seguro, somos rehenes de no sabemos quién”, sostuvo la conductora televisiva intentando obviar que la inseguridad empieza por casa. Reclamó a las autoridades “que pongan más atención, que nos cuiden”, aunque no queda claro cómo la habrían protegido de su entorno. El propio fiscal del caso ordenó investigar el entorno aunque también a empleados de servicios (pinturas, albañiles, y demás) que hubieran realizado tareas en la casa de la diva. Pese a todas las evidencias dijo que “se confirman las cosas que yo digo”, en alusión a sus críticas a las políticas de inseguridad.

Según fuentes de la investigación, el botín de los ladrones fue de alrededor de 100 mil dólares en efectivo, además de las joyas.

El asalto en el piso de Legrand fue ampliamente difundido en la red Twitter. El secretario de Derechos Humanos de la CGT, Julio Piumato, se refirió al caso y escribió: “¡100 años de perdón...!”.