A la altura del kilómetro 302, a la vera de la ruta nacional 19, en Córdoba, la whiskería El Deseo de la Vampira recibió visitas. Un operativo policial, con órdenes judiciales, allanó el lugar alrededor de las 4 de la mañana de ayer. Encontraron a una mujer paraguaya, encerrada y que ejercía la prostitución, cuya documentación de permanencia en el país estaba vencida. Buscaban a Marita Verón. La presencia de una división de bomberos, otra de perros, el Equipo de Antropología Forense y la propia fiscal de Córdoba Eve Flores, quien había ordenado el operativo, daban cuenta de que existían datos, si no ciertos, al menos creíbles para su verificación in situ. Una mujer que había ejercido la prostitución en el lugar denunció hace alrededor de cuatro meses que había visto a Marita en el lugar, que había intentado escapar y que la mataron de un tiro en la espalda. Según la versión, la habían enterrado en el terreno de la whiskería. Después de investigar la existencia del lugar, la fiscal ordenó el allanamiento para buscar sus restos. Al caer la tarde, la búsqueda fue suspendida y continuará hoy.

“Hace mucho tiempo que veníamos trabajando con este tipo de casos –dijo la fiscal Flores–. Los datos indican que habría habido un homicidio de una mujer que estaba en situación de prostitución y que podría estar enterrada en alguno de estos lugares. Lo que se está haciendo es la búsqueda de restos óseos, una muerte ocurrida años atrás.” La víctima del homicidio, según la investigación, podría haber sido Marita Verón.

El dato, al que la fiscal Flores le dio entidad después de varios meses de investigación, fue aportado el año pasado por una joven litoraleña a una amiga de Santiago del Estero, de unos 60 años. La joven, que había ejercido la prostitución, había comentado que conoció a Marita Verón en un prostíbulo del interior de Córdoba y que los dueños del lugar la habían matado de un tiro en la espalda cuando Marita intentaba escapar.

Después, la joven contó que enterraron el cuerpo de Marita en algún lugar del terreno de la whiskería. La joven que aportó el dato murió de sida a fines del año pasado. Su amiga y confidente se acercó a la División Trata de Personas de la policía santiagueña para relatar la historia. Trata de Personas comunicó al fiscal federal de Primera Instancia local, Pedro Simón, quien tomó testimonio a otras personas que habían escuchado el relato de la joven fallecida. Hace aproximadamente un mes envió el expediente de las averiguaciones a la fiscalía federal de Córdoba, donde se avanzó en la localización de los prostíbulos donde había trabajado la testigo. Finalmente, la fiscal Eve Flores decidió el allanamiento. Corresponde con dos prostíbulos encubiertos como whiskería, uno junto al otro, uno de ellos cerrado y el otro, denominado El Deseo de la Vampira, en funcionamiento y donde hallaron, durmiendo, a una mujer extranjera cuyo documento de permanencia ya había vencido y que ejercía la prostitución en el lugar. Ambos prostíbulos se encuentran a la vera de la ruta nacional 19, en el kilómetro 302, entre Montecristo y Piquillín, a poco más de 30 kilómetros de la ciudad de Córdoba.

“Estoy muy triste”, reconoció Susana Trimarco, madre de Marita Verón. “Yo en lo más profundo de mi alma busco a mi hija con vida, pero tengo que enfrentar la posibilidad, puede estar asesinada, enterrada en ese lugar.” Hoy, Trimarco viajaba desde Tucumán para estar presente en el rastreo.

Del operativo, que fue suspendido ayer para continuar hoy, participa Gendarmería, que emplea un georradar para detectar restos humanos bajo tierra, además del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), personal policial y civiles con perros que hacen un rastrillaje en el sector.