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A cinco meses del secuestro de Antonio Echarri, fue detenido ayer el mecánico Fabián Mónaco, de 35 años, señalado como el supuesto jefe de la banda que mantuvo cautivo durante ocho días, entre fines de octubre y principios de noviembre pasado, al padre del actor Pablo Echarri. La detención de Mónaco, que se había rapado para cambiar su fisonomía y no ser descubierto, fue efectuada cuando llegó en auto a la estación de servicio ubicada en Almirante Brown y Martín García, frente al Parque Lezama, allí donde se juntan los barrios de San Telmo y la Boca. En ese lugar, Mónaco se encontró con una mujer joven que sería su pareja. El hombre se entregó sin ofrecer resistencia a los efectivos de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Lomas de Zamora y de la de La Plata, que habían organizado un operativo conjunto para apresarlo.
La detención había sido ordenada por el juez federal de La Plata Humberto Blanco, quien había recibido información de inteligencia sobre la posibilidad de que Mónaco concurriera a esa estación de servicio de la Capital Federal. Con la detención de Mónaco, un mecánico a cuyo nombre se encontraba el auto en el que secuestraron a Antonio Echarri, en la causa queda un solo prófugo, el uruguayo Juan Esteban Torres Maciel, quien se hacía pasar por miembro de una fuerza de seguridad.
Cuando Mónaco llegó al lugar fue reconocido a pesar de su cambio en la fisonomía y fue detenido no bien tomó contacto con la mujer, que sin saberlo había sido utilizada como señuelo. El hombre se limitó a hacer un gesto de desagrado, admitió que había “perdido” y se entregó. El jefe de la DDI de Lomas de Zamora, comisario Horacio Módola, confirmó la detención de Mónaco, quien está acusado de ser coautor del secuestro. El operativo fue encabezado por Módola y por el comisario Julio Ravenna, de la DDI de La Plata. La detención se produjo a las 15.30 en un local de McDonald’s contiguo a la estación de servicio.
Los policías habían mantenido desde hace quince días una discreta vigilancia en la zona. Mónaco habría sido uno de los que custodió al padre del actor durante su cautiverio en una vivienda de la localidad bonaerense de Burzaco, junto con Ezequiel Di Cugno, de 23 años, hijo de un policía retirado de la Federal, quien apareció asesinado en noviembre pasado, aunque el cuerpo recién fue identificado en marzo. El cadáver había sido arrojado en un arroyo de la localidad de Sarandí.
El comisario mayor Ravenna dijo a la prensa que Mónaco es “uno de los sospechosos” de ser autor del crimen de Di Cugno, cuya investigación está a cargo del fiscal de Lomas de Zamora Juan José Vaello. Todo hace suponer que el crimen de Di Cugno, quien había logrado escapar en forma sospechosa unos minutos antes de que la policía rescatara sano y salvo a Echarri, fue un “ajuste de cuentas” entre los miembros de la banda.
Echarri fue secuestrado el 24 de octubre del año pasado en la parada de diarios de su propiedad, en Avellaneda, y liberado ocho días después luego de pagar un rescate de 200.000 pesos. La mayor parte de esa suma pudo ser recuperada por la policía. En noviembre el juez federal Arnaldo Corazza procesó por el delito de extorsión a Juan Carlos Cajigal, Germán Ferrand Luna y Esteban Furtado y ordenó la libertad de otras cuatro personas, entre ellas el padre de Di Cugno.
A los tres procesados se les adjudica el delito de “extorsión” por haber tratado de quedarse con el monto del rescate. Se supone que Mónaco, el fallecido Di Cugno y el prófugo Torres Maciel son los líderes de la banda. La Cámara Federal de Apelaciones de La Plata, en un fallo dictado el 23 de enero, criticó duramente la actuación de los policías que se atribuyeron el esclarecimiento del secuestro. El caso Echarri sigue envuelto en un mar de dudas y sospechas.