EL PAíS
Las Abuelas van al interior a seguir buscando a sus nietos desaparecidos
Después del éxito de su campaña para que los jóvenes con dudas las llamen, van al interior a repetirla. La gira empieza mañana, pero su anuncio ya tuvo consecuencias y empezaron las llamadas.
Por Victoria Ginzberg
Las obras de teatro, recitales de música, avisos radiales y televisivos que hablan sobre los niños desaparecidos hicieron que los jóvenes que tienen dudas sobre su identidad llamen por teléfono, manden mails o se acerquen personalmente a la Asociación de Abuelas de Plaza de Mayo. Pero para quienes viven en el interior del país, la tarea se hace más difícil, sobre todo con la crisis, que desde hace tiempo se convirtió en una situación constante. Por eso las Abuelas visitarán a partir de mañana distintas ciudades e intentarán hacer contacto directo con los chicos o con quienes puedan posibilitarles ayuda en momentos de incertidumbre. Antes de llegar, saben que la decisión fue acertada. “Los medios locales estuvieron informando y ya hay gente que está llamando y que nos espera para hacer denuncias”, contó Claudia Carlotto, directora de la Comisión Nacional por el Derechos a la Identidad (CONADI), organismo que acompañará a las Abuelas.
En 1997 las Abuelas organizaron un recital de rock y colgaron tras los distintos grupos de música un enorme cartel: ¿Vos sabés quién sos? Fue el principio de un cambio de estrategia, que apuntó de allí en más a interpelar a los jóvenes que pueden ser sus nietos para que se acerquen a la institución. Mientras seguían tras las pistas de las denuncias sobre niños apropiados que les llegan ininterrumpidamente, las Abuelas profundizaron ese llamado, que resultó un éxito. En 2001 apareció en radio y televisión un spot que mostraba a un joven frente a un espejo. “Mariano no sabe que existe Pedro. Pedro existe, su abuela lo está buscando. Si dudás de tu identidad o crees que sos hijo de desaparecidos, comunicate con las Abuelas de Plaza de Mayo.” Apenas salió este aviso la institución comenzó a recibir alrededor de cincuenta llamados diarios de personas que querían indagar en su origen, muchos provenían del interior del país.
La crisis económica se sumó a las dificultades que tienen quienes sospechan que pueden ser hijos de desaparecidos para venir a Buenos Aires. Si bien en algunos casos los padres “adoptivos” acompañan en la búsqueda, la mayoría se lanza a ese camino sin hablarlo con su familia. Por eso las Abuelas y la CONADI irán hacia los chicos. El lunes y martes estarán en Bariloche y el jueves y viernes en General Roca. En mayo viajarán a Paraná (6 y 7), Santa Fe (8 y 9), Mendoza (20 y 21) y San Luis (22 y 23) y a principios de junio llegarán a Mar del Plata.
Para hacer un viaje de tal vez muchos kilómetros y a escondidas se necesita tener una decisión bien madurada. Fue la que tuvo, por ejemplo, Gabriel Matías Cevasco, que en 1998 se presentó en la CONADI. Gabriel había sido secuestrado junto con su mamá el 11 de enero de 1977 y fue criado por una pareja de Pergamino a quien llegó por intermedio de una mujer policía. En Pergamino escuchaba hablar poco –más bien nada– de las Abuelas, apenas le llegaban comentarios sobre las Madres de Plaza de Mayo. Pero empezó a interesarse y leer en los diarios notas relacionadas con el tema, así llegó, después de un año de pensarlo, a la CONADI, donde tramitaron su examen genético.
Antes de visitar cada ciudad ambos organismos harán durante quince días una campaña de difusión para que la región esté al tanto de su presencia. El proyecto incluye también organizar una red de trabajo por la defensa y promoción del derecho a la identidad y porque –explicaron las Abuelas– “no se trata sólo de resolver los casos de apropiación durante la última dictadura militar, sino de crear las condiciones y el conocimiento de los derechos para que nunca más se repita este crimen”.
“CONADI en una comisión nacional pero atiende en Capital y muchas veces queda afuera gente que tiene demanda pero no medios económicos o no sabe cómo funciona. Por eso un objetivo del viaje es construir una red de facilitadores, personas que estén al tanto de los mecanismos y que pueda asesorar a la gente del lugar”, explicó Carlotto.
La presencia de la CONADI en las distintas ciudades del interior posibilitará que los jóvenes que decidan realizar su búsqueda puedan abrirsu legajo de presentación espontánea en el momento. Esta comisión, creada por ley en 1993, posee atribuciones legales que le permiten solicitar a cualquier organismo estatal o privado, nacional o internacional, documentación para que la investigación sobre la identidad de los chicos secuestrados durante la última dictadura sea más efectiva.