Gustavo Melmann, el padre de Natalia, la adolescente que fue secuestrada, violada y asesinada en 2001 en la localidad de Miramar, inició una “huelga de hambre” frente a los tribunales porteños en rechazo a la inminente liberación de los condenados por el homicidio de su hija. Melmann inició la medida el miércoles para reclamar a la Corte Suprema de Justicia que haga efectiva la pena de prisión perpetua con la que fueron condenados tres ex policías bonaerenses. “Los asesinos de mi hermana están a punto de quedar libres, cumpliendo sólo 8 años de prisión de los 25 que les corresponden”, dijo Nicolás Melmann, hermano de la joven que fue asesinada en febrero de 2001, cuando tenía 15 años. Los condenados son los ex policías Oscar Echenique, Ricardo Suárez y Ricardo Anselmini, y el acusado de entregador, Gustavo “El Gallo” Fernández, condenado a 25 años de prisión.