”Nada bueno puede construirse sobre la destrucción de la memoria colectiva de nuestros barrios”, dice Fernando Dahini, coordinador del espacio cultural La Estación de los Deseos. La premisa fue la guía de ese emprendimiento, protagonizado por vecinos y artistas de los barrios de Caballito y Flores, que cumple once años y lo celebra hoy con un festival. Como novedad, a los proyectos de incubación artística que se vienen desarrollando en ese espacio, los promotores del proyecto anuncian la inauguración de un estudio de grabación, cuyo objeto es “ser de utilidad a grupos y producciones para los cuales el acceso a un estudio comercial no es fácil por sus elevados costos”.

La Estación está emplazada en un galpón ferroviario, recuperado del abandono por los propios vecinos, en la playa de cargas de Caballito. Esos mismos terrenos codiciados para negocios inmobiliarios, pero también defendidos como espacios públicos por los vecinos o contemplados para desarrollos habitacionales.

El festival, que empieza hoy a las 18, contará con la participación de la Mega Big Band, Daniel Maza, Horacio López y la Escuela Clave y Todopoderoso, entre otros. Habrá además muestras de artes plásticas, percusión y acrobacia con arneses. La entrada –gratuita– es por la calle Bacacay, a 200 metros de Donato Alvarez.