Un tornado provocó graves daños en viviendas y edificios de la localidad de Florentino Ameghino, en el noroeste de la provincia de Buenos Aires, donde se produjeron voladuras de techos, que obligaron a evacuar a un centenar de personas, y la caída de cables de alta tensión, que dejaron a oscuras la ciudad. El temporal de viento y lluvias, que afectó además la zona central del país, causó destrozos en San Luis y el vuelco de vehículos en La Pampa. En ninguno de los casos se registraron heridos de gravedad. El Servicio Meteorológico Nacional dispuso para hoy un alerta en diez provincias de la zona central del país, sur de Santiago del Estero y sur del Litoral.

La situación más crítica se vivió en Ameghino, cabecera del partido del mismo nombre, que cuenta con aproximadamente 10 mil habitantes y se encuentra ubicada a 423 kilómetros al noroeste de la ciudad de Buenos Aires. El intendente Francisco Iribarren confirmó que se trató de “un tornado”.

Ocurrió cerca de las 22.30 del domingo y su duración no fue mayor a un minuto. El temporal dejó a esa ciudad sin energía eléctrica, arrancó techos de numerosas viviendas y empresas. “Alrededor de treinta techos volaron y la comuna debió asistir a cien personas que fueron evacuadas o se autoevacuaron”, añadió el jefe comunal. “Hay chapas esparcidas por toda la ciudad y los galpones de tres empresas quedaron desarmados, como si un gigante los hubiese aplastado con la mano”, relató.

En el aeroclub local se derrumbaron tres hangares y dos aviones que permanecían adentro quedaron destrozados. “Para la ciudad este lugar tiene un gran valor simbólico, de hecho teníamos allí un avión de 1911 que quedó destrozado”, señaló el intendente.

Desde el municipio también se encuentran preocupados “por las graves pérdidas que sufrieron las dos empresas más importantes del distrito, que emplean a unos 200 vecinos”. “En la empresa que fabrica girasoleros se destruyó la nave mayor, en tanto que la que produce semillas híbridas sufrió la voladura de techo de dos galpones y se les mojaron todas las semillas. En ambos casos los daños económicos son enormes”, explicó.

El jefe comunal relató que durante buena parte del día el municipio estuvo “sin luz y sin comunicaciones” y explicó que “hubo que utilizar un grupo electrógeno para abastecer de energía al hospital local y a la oficina de Control de Emergencias, que se montó en ese lugar”. Anoche ya se había reestablecido el 60 por ciento de la luz para consumo mínimo, “pero todavía tenemos una línea de alta tensión en mal estado, por lo que le pedimos a la gente que utilice lo mínimo de energía”, agregó.

Además, se restituyó también el agua potable y el 30 por ciento del alumbrado público, “pero todavía quedan situaciones puntuales, como la de las treinta casas a las que se les voló el techo y que el municipio tiene que dar respuesta porque se trata de las viviendas más humildes”.

En La Pampa, el temporal causó el vuelco de un micro de larga distancia y de una camioneta que circulaban por una ruta del norte provincial, donde ocho personas sufrieron lesiones leves. Los vehículos fueron arrastrados por el viento en el mismo sector de la ruta por donde circulaban y quedaron sumergidos en una laguna formada a un costado de la carretera a causa de las intensas lluvias.

Pablo Vicente, el conductor de la camioneta, manifestó que la lluvia no permitía ver la ruta y decidió “tirarse a la banquina”, cuando de repente una violenta ráfaga de viento volcó la camioneta y los sumergió en la laguna. Cerca de allí, un colectivo de la empresa Chevallier con cinco personas a bordo sufrió un episodio similar y terminó volcado dentro de la laguna.

En San Luis, un vendaval derribó árboles, postes de servicios telefónicos y eléctricos y provocó la voladura de un techo de una vivienda. Si bien en la capital puntana no llovió, la caída de agua fue intensa en la ciudad de Juana Koslay, donde algunas familias del barrio Las Vegas se evacuaron tras algunos derrumbes.

En Balde, a 40 kilómetros de la capital de esa provincia, “cayeron 35 milímetros en diez minutos”, informó Omar Terc, de la asociación San Luis Solidario, aunque allí no hubo daños. En San Luis capital cayeron árboles, ramas, postes del servicio de energía y de teléfonos.