Lunes, 20 de mayo de 2013 | Hoy
SOCIEDAD › MURIó DE UN DISPARO EN JUNíN, EN 2011
Un hombre comenzará a ser juzgado hoy por el crimen de su novia, una estudiante de maestra jardinera que fue asesinada de un balazo en la cabeza en la ciudad bonaerense de Junín, en 2011.
El debate comenzará a las 10, ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) Nº 1 de dicha ciudad que juzgará a Héctor Reyep, de 38 años, por el “homicidio agravado por el uso de arma de fuego” de Bárbara Zárate, de 22. El tribunal estará integrado por los jueces Miguel Angel Vilaseca, Karina Piegari y Esteban Melilli, mientras que la fiscal de juicio será Isabel Noemí Carniel, quien instruyó la causa.
En tanto, el abogado Fernando Topa representará a la madre de la víctima, constituida como particular damnificada. Por su parte, el imputado, quien está detenido en la Unidad Penitenciaria 49 de Junín, será defendido por letrado particular Eduardo José Aguilar.
Topa explicó que el móvil de homicidio fue que “Bárbara había intentado convencer al acusado de que dejara de comercializar droga y, como no pudo lograrlo, intentó finalizar la relación”.
Sin embargo, el defensor de Reyep aseguró que fue un “homicidio culposo”, ya que se trató de un “accidente”. “La víctima estaba manipulando un arma, él se la quitó y creyó que ya había sacado todas las balas del cargador cuando se le escapó el disparo”, dijo Aguilar.
En cambio, la fiscal Carniel dio por acreditado en la etapa de instrucción que el acusado mató a la joven tras una discusión ocurrida en el interior del inmueble que compartían en Junín.
Además, según Topa, en la escena del crimen hubo dos personas más presentes y, en ese sentido, una vecina de la víctima que declaró como testigo afirmó que las vio salir del inmueble junto al imputado luego de escuchar la discusión entre la pareja y el posterior balazo. Las dos personas que lo acompañaban no fueron reconocidas.
“Reyep declaró antes que se hicieran los peritajes, que luego coincidieron con su testimonio respecto de que fue un accidente”, aseguró el abogado defensor, quien agregó: “No tuvo la intención de matar a la persona que amaba”.
El hecho ocurrió el 8 de septiembre de 2011, alrededor de las 6.30, en el interior del departamento, ubicado en la calle Mariano Moreno 340 de Junín, donde la víctima y el acusado, apodado Peliculón y Loco, convivían desde hacía tres meses. Allí se originó una discusión de pareja que terminó cuando Bárbara recibió un disparo en la cabeza efectuado con un revólver calibre 22.
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