El día después del debut del metrobús fue el debut del piquete al metrobús. Trabajadores de la Federación de Sindicatos Municipales Bonaerenses (Fesimubo) y empleados de la ex Jabón Federal aprovecharon la concentración de colectivos en los carriles exclusivos de la avenida 9 de Julio para cortarlos y así multiplicar el caos y la consiguiente visibilización de sus reclamos. En principio, lo que consiguieron fue un desalojo policial a la fuerza, que terminó con siete manifestantes detenidos y cinco agentes heridos por pedradas.

Los choques se produjeron a las 14.40, cuando la Policía Federal y la Metropolitana desalojaron las protestas que había iniciado al mediodía un grupo de empleados municipales bonaerenses frente a la sede de la Federación Argentina de Municipios (FAM), presidida por el intendente Julio Pereyra, y trabajadores de una fábrica de jabones.

Los manifestantes de la Fesimubo se instalaron en 9 de Julio a la altura de la avenida Córdoba, resistieron con palos y piedras el avance de efectivos de las dos fuerzas, apostados con perros y camiones hidrantes en la zona.

“Nosotros vinimos pacíficamente a la FAM a solicitarles que abran el diálogo para tratar paritarias, tuvimos que cortar la avenida para que venga algún intendente”, dijo Aldo Castro, secretario gremial de Fesimubo, alineado con la CGT de Hugo Moyano. El sindicalista dijo que “pasadas las 11 nos pidieron que nos retiráramos y liberáramos la 9 de Julio, y cuando nos estábamos moviendo agredieron a los compañeros a patadas y dieron la orden de que la policía avanzara sobre los trabajadores”.

Castro, que precisó que dos manifestantes terminaron internados en el Hospital Rivadavia, lamentó “que la gente no haya podido pasar”, y agregó que “es la única forma que teníamos para que tomen nota de lo que nos pasa a los municipales, que tenemos sueldos de miseria”. Mientras se desconcentraban, Castro aseguró que “nunca” tuvieron paritarias y agregó que “se viene la marcha nacional de los municipales”.

Por su parte el comisario de la Policía Federal Guillermo Calviño, a cargo del operativo, explicó que “se les pidió que desalojen y no quisieron, nos agredieron con palos y piedras y tuvimos que detener a las personas que provocaban disturbios para restablecer el orden”.

Los trabajadores de la fábrica de jabones de capitales peruanos Alicorp, ex Jabón Federal, con sede en San Justo, La Matanza, reclamaron mejoras laborales. Esos manifestantes portaron carteles en los que denunciaron “precarización laboral” y “trabajo esclavo”, y reclamaron la efectivización y el pase a planta permanente del personal contratado, entre otras demandas.

Fuentes policiales confirmaron que a raíz de los incidentes siete personas fueron detenidas y alojadas en la comisaría 3ª de la Ciudad de Buenos Aires, y manifestaron que cinco agentes resultaron heridos, por lo que fueron asistidos en el Hospital Churruca.

La Procuración General porteña realizó una denuncia penal contra los manifestantes ante la Justicia correccional.