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El periodista Edgardo Esteban es veterano de Malvinas, pero además su padre, Joaquín Esteban, fue un militante de la resistencia peronista en Morón, asesinado a balazos por un sector del peronismo vinculado con José López Rega, en 1975 y en la puerta de su casa, delante de sus hijos pequeños y su esposa embarazada. El asesino de su padre, Pedro Martin, fue luego desaparecido durante la dictadura. “Hace pocos días –relata Esteban–, recorriendo con mi hijo y mi señora por primera vez el Parque de la Memoria, quedé sorprendido por varios motivos. En primer lugar lo que significa para nuestra historia reciente un espacio que simboliza profundamente lo que nos pasó como sociedad en los años ’70 y en lo que es nuestra lucha en el presente y de las generaciones venideras en pos de la verdad, memoria y justicia.”

En el parque se señala que “la nómina de este monumento comprende a las víctimas del terrorismo de Estado, detenidos, desaparecidos y asesinados. Y a los que murieron combatiendo por los mismos ideales de justicia y equidad”.

En ese paseo, Esteban comprobó que en la lista no figura su padre. “En nuestra condición de hijos de Joaquín Esteban –señala en su nombre y en el de su hermano Raúl–, quizá por un error o la falta nuestra de no haberlo solicitado previamente, constatamos que el nombre de nuestro padre no figura en la lista de las víctimas de la violencia vivida en los años ’70 y ahora solicitamos que sea colocado como parte del recuerdo de esa trágica historia.”

Paradójicamente sí figura el nombre de Pedro Martin, el asesino de Joaquín Esteban, miembro de la derecha peronista que ya había sido acusado de corrupción y había estado varios años prófugo hasta que recaló en la Secretaría de Gobierno de la Municipalidad de Morón, como parte del lopezrreguismo.

El ex intendente Juan Carlos Rousselot también desplazado más tarde por acusaciones de corrupción, había reivindicado a Martin. Pero luego el Concejo Deliberante dio marcha atrás a esa situación injusta y en contrapartida se colocó una placa conmemorativa en la casa donde fue asesinado Esteban, en la que se lo recuerda como un destacado militante de la resistencia peronista.