SOCIEDAD › RECHAZO DEL VATICANO A LAS UNIONES DE HOMOSEXUALES
Otro ataque al casamiento gay
Sin intención de sorprender, el Vaticano difundirá mañana un documento en el que reafirma su ya conocida oposición a las uniones homosexuales por ser “nocivas para el recto desarrollo de la sociedad humana”. También esta vez, como ya lo había hecho en enero, divulgará una solicitud dirigida a todos los políticos del mundo que sean creyentes para que se movilicen contra las leyes que favorecen tales uniones, voten en contra de ellas y expresen públicamente su oposición. El documento fue producido en medio de la creciente preocupación generada por la decisión de varios países católicos –y ciudades, como Buenos Aires– de legislar en favor de la unión de personas del mismo sexo.
Según anunció ayer el padre Ciro Benedittini, vocero adjunto de la Santa Sede, se trata de “un documento de pocas páginas que no contiene nada de nuevo respecto de la posición oficial de la Iglesia sobre la unión de homosexuales”. En tanto, el autor del documento, el cardenal alemán Joseph Ratzinger, prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, definió: “Las uniones entre homosexuales son nocivas para el recto desarrollo de la sociedad humana, sobre todo si su peso efectivo aumenta en el tejido social”. El documento aparece luego de que varios países católicos han adoptado leyes que permiten la unión entre gays, entre ellos Francia y algunas regiones autónomas de España, lo que preocupa a la jerarquía de la Iglesia Católica. De la misma manera que recibió con alarma el hecho de que el gobierno porteño haya reglamentado la unión civil de gays y lesbianas, normativa que podría extenderse a otros lugares de América latina, el continente más católico, con más de mil millones de fieles. La preocupación de las autoridades eclesiásticas también se extiende a Europa del Este, donde Croacia, uno de los países más católicos de esa región, introdujo este mes una ley que equipara la unión entre homosexuales a las uniones libres.
En enero pasado, el Vaticano ya había divulgado un documento, preparado también por Ratzinger, titulado Nota doctrinal sobre ciertos asuntos que afectan la participación de los católicos en la vida pública, en el que recomendaba a los parlamentarios católicos de todo el mundo oponerse públicamente a las uniones gays.