Un cabo de la Policía Federal fue asesinado de un tiro y catorce puñaladas por delincuentes a los que fue a buscar porque instantes antes habían intentado robarle a su mujer, en la ciudad santafesina de Santo Tomé. El suboficial fue primero baleado en un tiroteo con los asaltantes y, una vez herido, una mujer y un joven se le aproximaron y le aplicaron puñaladas en la espalda y el torso, además de arrojarle un objeto contundente en la cabeza. Por la seguidilla de crímenes en la zona metropolitana de Santa Fe, que dejó un saldo de seis muertos en 24 horas, incluido el policía federal, fueron desplazados ayer los dos jefes policiales máximos de la Unidad Regional, Rafael Grau y Reinaldo Kiener.

Por el hecho hay cuatro detenidos, uno de los cuales llegó a ser herido de bala por el efectivo y se encuentra hospitalizado.

Voceros de la Dirección de Relaciones Policiales de la Unidad Regional I informaron que el episodio sucedió el lunes a las 20.30, cuando el cabo Gonzalo Pérez, de 37 años, que se desempeñaba en la Delegación Santa Fe de la PFA, recibió un llamado de su mujer, quien lo alertó de que varias personas intentaron entrar a robar a su casa de Santo Tomé.

Pérez fue con su auto Renault Sandero a su casa, en Santa Fe y Almaraz, de esa localidad santafesina, y luego de que su mujer le relatara lo sucedido salió a buscar a los asaltantes.

A unas cuadras de la vivienda, el policía vio a los supuestos delincuentes, se bajó del auto y los increpó por el intento de robo.

Según relataron las fuentes, en ese momento, uno de los ladrones extrajo un arma y le efectuó un disparo que impactó en la zona intercostal izquierda y le atravesó el tronco. Con Pérez ya herido, se acercó una mujer que comenzó a aplicarle puñaladas en la espalda y un joven que lo apuñaló en el tórax y le golpeó la cabeza con un palo.

A pesar de estar gravemente herido, el policía logró disparar su arma y herir a uno de los sindicados como agresores, de 18 años, que quedó detenido.

Inmediatamente llegaron al lugar efectivos policiales y tanto el suboficial como el sospechoso herido fueron trasladados al Hospital Cullen. Poco antes de la medianoche, el cabo murió a raíz de las graves lesiones sufridas.

Los médicos que lo asistieron constataron que Pérez había sufrido once puñaladas en la espalda, tres en el tórax, un disparo en la zona intercostal con orificio de salida, traumatismo de cráneo, perforación en los dos pulmones y fractura de pelvis.

Por el ataque fueron apresados además del atacante herido, una mujer de 21 años, sindicada como quien le aplicó la mayor cantidad de puñaladas al policía, otro joven de 22 y un adolescente de 17.

Sobre el caso, el fiscal general Ricardo Fessia declaró que se originó “en una cuestión absolutamente menor, si se quiere”, ya que “la mujer (del policía) fue abordada en la calle y este hombre salió por ellos (los asaltantes)”. “Fue atacado salvajemente porque aparte de las puñaladas tenía contusiones en la cabeza, estaba quebrado y no sólo eso, sino que le destruyeron el auto”, añadió Fessia.

Pérez se convirtió en el segundo efectivo de la PFA asesinado en el mismo día, ya que el lunes a la mañana, en el barrio porteño de Villa Crespo, delincuentes mataron de un tiro en la cabeza al sargento primero Juan Orlando Castillo (44), numerario de la División Armamento y Munición, durante un asalto a un financista a quien custodiaba.

En tanto, el del policía federal fue el quinto homicidio registrado ayer en la zona metropolitana de Santa Fe, ya que anteriormente fueron asesinados en distintos hechos Facundo Segado (14), Néstor Iván Gutiérrez (24), Jonatan Greco (26) y Facundo Andrés Díaz (21).