Un subcomisario de la policía de la ciudad entrerriana de Paraná fue condenado a 10 años de prisión por haber abusado sexualmente de sus dos sobrinas entre 2004 y 2008. El hombre no podrá acercarse a la casa de las víctimas, mantener contacto con los padres, salir del país ni moverse de la ciudad donde vive, Concordia, sin comunicarle a la Justicia sus pasos, hasta que el fallo quede firme.

La Sala I de la Cámara del Crimen, conformada por los jueces José María Chemez, Hugo Perotti y Gustavo Mayer, lo condenó de manera por “tres abusos sexuales con acceso carnal reiterado y dos abusos sexuales gravemente ultrajantes” en perjuicio de una sobrina que tenía entre 10 y 11 años y por el “abuso sexual simple” contra la otra niña, de entre 7 y 8. Tras conocerse la sentencia, un grupo de allegados al policía amenazó al fiscal Marcos Rodríguez y agredió verbalmente a periodistas y fotógrafos que se encontraban en el recinto. El caso había sido descubierto por una psicopedagoga y una psicóloga que atendían a las niñas y que al ver que no podían expresarse verbalmente les habían recomendado “escribir y dibujarlo”. Luego las pericias médicas confirmaron que habían sido abusadas.