La madre del niño de dos años encontrado sin vida en un descampado de Ostende, el lunes, continuará detenida como principal sospechosa de haber cometido el crimen de su hijo. Los vecinos declararon que la joven lo maltrataba y desatendía. En tanto, el padre del niño fue liberado ayer por la tarde, luego de que un testigo declarara que el hombre pasó el fin de semana fuera de esa ciudad balnearia.

Los investigadores comprobaron que el padre de Benjamín, Leonardo Aguilera, de 30 años, no estuvo en Ostende durante el fin de semana en que fue asesinado el niño. El principal testimonio que favoreció a Aguilera fue el de un remisero que declaró ante el fiscal que el viernes lo había llevado a Maipú y que el domingo lo había traído de vuelta a Ostende, algo que lo deja fuera de la escena del crimen de su hijo.

En tanto, la situación de la madre del niño, Claudia Ayala, de 22, quedó comprometida por lo contradictorio de las declaraciones que hizo a los investigadores cuando responsabilizó a su ex pareja por el homicidio del niño, quien fue producto de una relación extramatrimonial. La mujer declaró que durante el fin de semana habían discutido en un auto estacionado frente a su casa y que, durante la pelea, Aguilera llevó a Benjamín al asiento trasero, lo asfixió con sus propias manos y se fue con el cuerpo del menor hasta un descampado. Según la mujer, Aguilera arrojó al niño en esa zona antes de huir, aunque señaló un lugar distinto del sitio donde fue hallado el cuerpo, muy cercano a su casa. Al ser interrogada, Ayala no pudo explicar por qué no había llevado al niño inconsciente al hospital o al menos denunciado el hecho en la comisaría local.

En la causa también declararon ante el fiscal vecinos de la joven, quienes sostuvieron que ella maltrataba a su hijo, no lo alimentaba como correspondía y que inclusive reconocía que lo descuidaba por consumir alcohol en exceso. Uno de los testigos aseguró que, en una oportunidad, le preguntó por el niño y ella le respondió que no lo veía desde el día anterior, y agregó: “Estaba tan en pedo ayer que no sé si lo regalé o no”. El titular de la fiscalía descentralizada de Pinamar, Juan Pablo Calderón, reclamó a la Justicia de garantías que convierta en detención la aprehensión de la mujer, a la que indagó por el delito de “homicidio calificado por el vínculo”, que prevé la pena de prisión perpetua.

El cuerpo de Benjamín fue hallado el lunes a la mañana en un descampado de dos manzanas ubicado en la esquina de Dante y Gaona, a tres cuadras de la ruta provincial 11 y a 25 del mar, en Ostende, partido de Pinamar.

Un hombre que pasó por el predio vio el cuerpo y se comunicó con la comisaría local, por lo que policías se trasladaron hasta el lugar y constataron que se trataba de un niño fallecido, con lesiones por golpes en el rostro, la garganta y los brazos, que quedaron prácticamente desmembrados. Los informes forenses preliminares recibidos por el fiscal Calderón indicaron que la muerte se había producido por asfixia y que el desmembramiento fue producto de ataque de animales del lugar. Ayer restaban los resultados de la autopsia practicada en la Asesoría Pericial de La Plata.