La Mesa #LibertadParaBelén lanzó una nueva campaña, esta vez con el hashtag #YoSoyBelén, dirigido a lograr apoyo masivo hasta que la Corte tucumana anule el proceso judicial absurdo al que fue sometida. La campaña fue lanzada dos días después de que un grupo de médicos y “pacientes” maspapistas del hospital Avellaneda realizaran un abrazo al edificio en apoyo al médico que la denunció.

El abrazo contó con la convocatoria del propio director del Hospital, Luis Medina Ruiz, quien sostuvo que se realizó “en apoyo a un colega y compañero que debido a la causa judicial sufrió escraches anónimos en las redes sociales y consideramos que eso es totalmente injusto. Pusieron la foto de él y pedían que se lo escrache por haber denunciado la situación y eso es totalmente inexacto”, remarcó y sostuvo que el médico “cumplió con todos los protocolos”. Extraño protocolo, según el expediente judicial, cuando Belén dijo que había perdido un coágulo, el médico le sugirió “¿no habrás perdido un bebé?”. Medina Ruiz, además, aseguró que el médico no fue quien inició la causa judicial porque la policía actuó de oficio “porque hay un destacamento cercano”. Medina Ruiz no explicó cómo se enteró la policía y cómo intervino en su propio hospital. Aseguró que Belén no fue torturada, aunque se despertó sedada y rodeada de policías que le revisaban sus partes íntimas. Un hospital de hábitos extraños. Respecto a la pérdida del feto no aportó datos.