Tres federales de la seccional 36ª fueron acusados de no haber evitado las torturas contra un hombre detenido tras una persecución en el barrio de Villa Soldati. Los federales estaban convencidos que perseguían al autor del crimen de un agente. La acusación la formuló el fiscal general a cargo de la Procuraduría de Violencia Institucional (Procuvin), Miguel Palazzani, junto a los fiscales ad hoc José Nebbia y Fernando Vallone, quienes solicitaron al Juzgado de Instrucción 26 la declaración indagatoria para los tres polis.

Se trata del comisario Fabio Adrián de Paola, la subcomisaria Karina Flores y el subinspector Andrés David Castrellón, acusados de omitir evitar las torturas contra un detenido el 18 de mayo de 2016.

En su testimonio, la madre del hombre afirmó que a pesar de que al momento de la detención su hijo estaba tirado en el suelo lleno de sangre, los policías le pegaron patadas en la cabeza y que “un oficial le decía mátalo y el otro le contestaba que no porque iba a ‘cantar’, que lo necesitaban vivo”. La víctima fue trasladada a la comisaría 36ª, donde fue arrastrado hacia el interior de la dependencia, insultado, fotografiado y filmado por efectivos de la Brigada de Investigaciones de la comisaría 48ª, quienes le proferían amenazas por –supuestamente– haber baleado a un federal.