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Con un recital poco usual, que juntó en el escenario al chamamecero Antonio Tarragó Ros y a la banda de la Gendarmería Nacional, el ministro de Justicia y Seguridad de la Nación, Gustavo Beliz, produjo el lanzamiento de la llamada “fase social” del operativo de seguridad que se viene realizando en el barrio Ejército de Los Andes, en Ciudadela, conocido comúnmente como Fuerte Apache. En su discurso, Beliz sostuvo que la idea ahora es “complementar las políticas de seguridad con una política integral en materia social” y esto incluye “una mejor iluminación del barrio y la realización de actividades educativas”.
Beliz fue acompañado por el secretario de Seguridad Interior, Norberto Quantín, y por la subsecretaria de Participación Comunitaria de la provincia de Buenos Aires, María Marta Arriola. De acuerdo con los datos oficiales, el operativo de seguridad, que virtualmente monta un cerco de gendarmes en torno del barrio y que comenzó a instrumentarse el año pasado, ha producido “una reducción significativa de los delitos en el barrio”. Lo que no pudo confirmarse, empero, es que ese barrio, junto con La Cava y la villa Carlos Gardel, también cercadas, fueran el centro de operaciones de las bandas dedicadas a los secuestros extorsivos, tal como lo demostró dramáticamente el caso de Axel Blumberg.
Beliz afirmó que la experiencia piloto, mediante la cual –según los datos oficiales– se logró bajar el delito en Fuerte Apache, será reproducida “en el resto del país con fuerte participación de los municipios y con un importante refuerzo con fuerzas federales”. El ministro explicó en el acto que la polémica ley para bajar la imputabilidad de los menores a 14 años “va a ser complementada con una ley de protección de la infancia que brinde una mayor contención”.
También destacó el lanzamiento de los “juicios por jurados” porque serán “los propios ciudadanos quienes podrán ejercer su derecho de voz y voto para la condena”. En el plano judicial mencionó la necesidad de que “haya fiscales y jueces en los barrios para que las gente los pueda conocer y les pueda hacer rendir cuentas” sobre su desempeño.
Beliz eludió pronunciarse sobre la polémica judicial en torno del caso García Belsunce (ver aparte), aunque aprovechó la pregunta para anunciar que se está elaborando un proyecto para unificar los códigos procesales penales en todo el país. “El proceso penal debe ser uno solo y común”, sostuvo el ministro.