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Casi un millón y medio de pesos fueron robados el miércoles pasado de un camión blindado, que estaba detenido en una estación de servicio del partido de General Rodríguez, por tres ladrones armados que redujeron a los tripulantes del blindado. Por el hecho quedaron detenidos dos custodios que vigilaban el dinero porque, según la policía, las declaraciones que realizaron “resultaron contradictorias”. Hasta ayer no había ningún otro detenido por el hecho. Los investigadores aseguraron que el dinero robado había sido recolectado en distintas empresas de esa zona del oeste del Gran Buenos Aires, entre ellas La Serenísima, y cuando se produjo el asalto el blindado estaba regresando a la Capital Federal. “Fue muy rara toda la operativa del asalto y muy extraño que los delincuentes les hayan dejado las llaves del camión, los teléfonos celulares y el equipo de radio de la empresa”, dijo un jefe policial que participa de la investigación.
Las dudas llevaron a los investigadores a pedir la detención de los custodios, cuyas identidades no fueron reveladas por orden del juez de Garantías de Mercedes Facundo Oliva. Ayer por la tarde el fiscal Juan Rodolfo Mires, a cargo del caso, tomó declaración a los dos detenidos. En principio la causa fue caratulada como “privación ilegítima de la libertad y robo calificado”. El botín robado asciende a 1 millón 147 mil pesos, suma que había sido recogida en plantas de la firma La Serenísima y en otras empresas.
El caso ocurrió el miércoles pasado a las 18, cuando un camión blindado de la empresa Prosegur se detuvo en una estación de servicio de la firma Petrobras, ubicada en colectora y Ruta 28 del partido de General Rodríguez, al oeste del Gran Buenos Aires. En el camión había cuatro personas: dos custodios, el chofer y el portavalores. Allí, descendieron para ir al baño tres de ellos. Sólo el portavalores se quedó en el vehículo, según informó el comisario mayor Alejo Díaz, de la Delegación de Investigaciones de Moreno.
“Cuando ingresaron al baño fueron reducidos por tres personas armadas quienes ataron a dos, al tercero lo tomaron como rehén y se dirigieron hacia el camión donde amenazaron al portavalores que estaba adentro con matar a su compañero si no abría la puerta. Subieron todos al camión y se alejaron unas 15 cuadras del lugar. Los ladrones tomaron el dinero, dejaron las llaves del vehículo, se alejaron en tres autos diferentes y las víctimas regresaron a la estación de servicio. En total el hecho duró 15 minutos”, detalló a Página/12 el comisario Díaz.
Mientras, el chofer y un custodio que habían sido atados en el baño de la estación de servicio fueron liberados por un hombre que se dirigió allí sin percibir lo que estaba ocurriendo. Según la policía, cuando el camión regresó al lugar, sus tripulantes hicieron la denuncia por teléfono a la policía y también a la empresa Prosegur. “Las declaraciones de las propias víctimas resultaron contradictorias”, advirtió el comisario.
“Hay dos normas internas de la empresa Prosegur que se desobedecieron. De cuatro tripulantes del camión, bajaron tres, cuando deben bajar de a uno. Y el portavalores jamás debió abrir las puertas del camión por más que estuvieran amenazando a su compañero”, describió el comisario.
Esta no es la primera vez que personal que trabaja transportando valores es investigado por robos contra camiones blindados. El 11 de septiembre del año pasado, la Justicia dictó la prisión preventiva a un chofer de blindado y a otro hombre por el robo de un millón de pesos.

Informe: Silvia Marchant.