SOCIEDAD › SIETE MUERTOS, ENTRE ELLOS
MEDIA FAMILIA APLASTADA POR UN ARBOL
Con toda la furia de un temporal
En Luis Guillón, una mujer y dos de sus hijos fueron aplastados por un inmenso eucalipto. Otros tres fallecieron electrocutados. Unas 800 personas fueron evacuadas en la provincia de Buenos Aires.
Un eucalipto de veinte metros de alto por dos de ancho cayó sobre una casilla de Luis Guillón, en el sur del conurbano, y terminó de un golpe con la vida de una mujer de 28 años y dos de sus hijos, de tres años y seis meses. Fue uno de los dolorosos efectos del temporal de lluvia y viento que también causó siete muertes en la provincia de Buenos Aires y en Rosario. En el conurbano bonaerense, 800 personas fueron evacuadas por causa de inundaciones, 600 de ellas de Berisso. Los vientos de más de 90 kilómetros por hora que soplaban peligrosamente sobre el río, imposibilitaron la partida a Uruguay a cerca de 1300 pasajeros de Buquebús, que armaron revuelo con sus quejas en el puerto de la ciudad.
A las 6, el inmenso eucalipto de Santa Catalina y Maquinista Savio, en Luis Guillón, partido de Esteban Echeverría, se derrumbó. Algo que los vecinos temían desde hacía tiempo, por lo que habían realizado varios pedidos para que lo cortaran y terminara su amenaza. Pero sus reclamos no fueron oídos. La fuerza del viento y el agua que ablandó las raíces lo tiraron sobre la casilla en la que vivían 11 personas. En el instante murieron Alejandra Olivera y dos de sus cuatro hijos. Los demás habitantes, la mayoría familiares, salieron de la casa indemnes. Para poder sacar a los hijos restantes de la mujer tuvieron que hacer un agujero en una pared. Los chicos, más grandes que sus hermanos fallecidos, tenían heridas leves. Los bomberos intentaban en la tarde de ayer conseguir una pluma para levantar al árbol caído, que todavía mantenía aprisionados a los cuerpos.
Otras tres personas murieron por electrocución en Isidro Casanova, Dock Sud y Tristán Suárez. A las 6, Janneth Elidí Heredia, de 20 años, recibió una descarga en su casa de Dock Sud cuando tocó la puerta, que estaba en contacto con un cable. Gustavo Díaz, de 27, murió a la misma hora al conectar un cable frente a su vivienda de Tristán Suárez, porque durante la tormenta se había quedado sin energía eléctrica. A las 9, María Aspere, de 30 años, murió cuando descolgaba ropa de un alambre en los fondos de su domicilio de Casanova. Su pequeño hijo sufrió heridas.
Desde el Ministerio de Desarrollo Humano bonaerense se informó que en Berisso había 600 evacuados, en Ensenada 63 y en Quilmes 38, por motivo de la crecida del Río de la Plata. En esta zona se esperaba un nuevo avance en el caudal para las 22, según señaló el Servicio Meteorológico Nacional (SMN). El ministro de Desarrollo Humano bonaerense, Juan Pablo Cafiero, indicó que la crecida dejaba un panorama “muy complicado en Berisso”. Y contó que “la mayoría de los evacuados de este partido son chicos y ancianos, y se les entregó colchones, zapatillas o pañales”. Fueron alojados en el Gimnasio Municipal, donde también se les dio ropa seca y raciones de alimento. “Otras muchas familias tienen hasta un metro de agua dentro de sus casas, pero se niegan a retirarse porque tienen miedo a los saqueos”, afirmó Cafiero. Respecto de ofrecimientos de ayuda, el ministro dijo que “hasta ahora no la necesitamos. Cuando necesitemos lo vamos a pedir”, y comentó que “por ahora tenemos miedo de que pase lo mismo que en 1989, cuando hubo una gran inundación en esta zona”. Efectivos de Prefectura Naval rescataron a 25 isleños de sus viviendas de las islas Paulino y Santiago.
El alerta meteorológico regía ayer para el Río de la Plata y las zonas costeras de la Argentina y Uruguay. En estas regiones persistían lluvias intermitentes y vientos del sur con ráfagas que llegaban hasta los 105 kilómetros por hora. El temporal también produjo demoras de más de cinco horas en un tren que traía a turistas desde Mar del Plata hasta la estación de Constitución. La caída de un eucalipto sobre los cables del tren eléctrico a la altura de Burzaco mantuvo interrumpido por varias horas el servicio de Metropolitano que va desde Glew hasta la ciudad.
En Capital Federal, las lluvias y vientos provocaron el derrumbe de una pared en la esquina de Conde y Dorrego, donde dos autos resultaron dañados. Hubo caídas de árboles en Palermo, Belgrano, La Boca y Barrio Norte. Las precipitaciones produjeron inundaciones en Núñez y en elpartido de Avellaneda, al punto de que la avenida Libertador y la bajada sur del antiguo puente Avellaneda fueron cortados al tránsito.
El SMN detalló que desde las 9 del domingo hasta las 9 de ayer, el agua caída en el área metropolitana fue de 67,5 milímetros, con mayor intensidad durante la madrugada y la mañana del lunes. Ambos valores “son normales para el mes de enero”, aseguró la pronosticadora de turno del SMN, Marta Fernández. “Lo que pasa es que prácticamente no llovió el resto del mes. Y recién se dio en forma continuada los últimos días del mes”, agregó. Adelantó que continuarán algunas precipitaciones y chaparrones para hoy, y los vientos van a seguir prevaleciendo desde el sur, “lo que provoca un descenso de la temperatura”. En los próximos días, las temperaturas máximas van a oscilar entre los 22 y 25 grados y las mínimas entre los 12 y 13 grados.