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Según revela la prensa israelí, podría tratarse de una “tradición de generaciones” de adolescentes. Se trata de los estudiantes del Instituto de Sdé Boker que, según confesaron, se inician sexualmente sobre la tumba del artífice del Estado judío, David Ben Gurion. El hábito entre los que terminan los estudios secundarios en ese prestigioso Instituto en el kibutz de Sdé Boker, en el desierto meridional del Neguev, suelen practicarlo durante los festejos con motivo de la finalización del curso. Ben Gurion, que tras una agitada carrera política proclamó la creación del Estado judío en mayo de 1948, poco antes de estallar la primera guerra árabe-israelí, se retiró al desierto con el deseo de servir de ejemplo a la juventud. Su tumba se halla en el pequeño cementerio del kibutz, junto a la de su esposa Pola. “Juramos que perderíamos la virginidad sobre la tumba de Ben Gurion”, dijo un estudiante de bachiller del Instituto. Una ex alumna recordó que “al principio era la locura de una minoría, pero luego se extendió”.