Sin el testimonio del acusado Claudio Alvarez, que se negó a declarar, comenzó ayer el juicio por el asesinato de una mujer, su violación y la de su hija adolescente ocurridas el año pasado en el barrio de Núñez. En el proceso se intentará determinar si el imputado es el “violador de Núñez”.

Quienes sí brindaron su relato fueron el subinspector Marcelo Daniel Román, el primer policía que llegó a la escena del crimen el 3 de diciembre de 2005, y la hija y hermana de las víctimas, Sandra Calvo.

En la primera jornada del juicio, que se desarrolla en el Tribunal Oral Criminal 13 de la Ciudad, Román recordó que el día del hecho encontró a la pequeña, conocida como “B”, “en el peor estado que se pueda imaginar”. Además, comentó que la chica señaló a Alvarez como el autor del homicidio de su madre y de su violación.

Dentro del dramático relato del policía Román, se destacó la descripción del momento en que la adolescente, de frente a un espejo, “comenzó a temblar como una hoja” cuando vio el reflejo de alguien y escuchó su voz. Ese alguien era, según afirmó Román, el acusado.

El asesinato que se juzga es el de Elsa Escobar, ocurrido en medio de la ola de violaciones que se dio en Núñez a fines del año pasado. Sandra Calvo, hija y hermana de las víctimas, aseguró que fue una “sensación desgarradora y dolorosa volver a recordar todo lo que pasó” la noche en que su familia fue atacada.

“Espero que se le dé la máxima condena permitida, no veo que haya inconvenientes para que se le aplique lo máximo, porque hay muchas pruebas. La instrucción de la causa fue buena”, sostuvo Sandra, visiblemente afectada, al término de la audiencia.

La mujer remarcó que “si la Justicia hubiera actuado como corresponde, esto no hubiera sucedido”, en alusión a que Alvarez fue liberado antes de terminar de cumplir una condena a 14 años de prisión por robo y violación. En la época del crimen se generaron fuertes cuestionamientos hacia los magistrados que habían otorgado el beneficio a Alvarez: Gabriel Ghirlanda y Sergio Delgado.

Cuando le tocó el turno para declarar, el imputado se limitó a consignar sus datos personales: que es soltero y huérfano de padre, y a confirmar que pasó 10 de sus 31 años preso.

El abogado de la familia de Escobar, Claudio Mazaira, afirmó que “los testimonios de hoy (por ayer) fueron contundentes”. Por su parte, el defensor de Alvarez, Luis Llaneza, insistió con la teoría de que Jorge Braco, padre de B, fue el autor de los ataques, pero el hombre sólo está citado como testigo y declarará mañana.

En ese sentido, Llaneza adelantó que en la jornada de hoy reiterará el pedido para que se le realice a Braco un estudio de ADN, y se lo compare con el de la sangre encontrada en la escena del crimen.