SOCIEDAD
Más pruebas en su contra
Mientras Horacio Conzi es apenas un fantasma que envía cartas, los fiscales Mario Kohan y Hernán Collantes siguen acumulando elementos en su contra. “Las pruebas que confirman el choque entre la camioneta Cherokee de Conzi y el Ford Galaxy en el que iba la víctima (el joven Marcos Eschenone) fueron certificadas una vez más”, informaron a Página/12 fuentes cercanas a la causa. La nueva pericia surge del trabajo de desmantelamiento de la Cherokee, para identificar los trabajos mecánicos que se le hayan realizando, incluyendo el choque que tiene en uno de los costados, el izquierdo, que fue burdamente disimulado en un intento por liberar de culpas al hermano prófugo.
Las nuevas pericias, cuyos resultados finales se conocerán el fin de semana, se realizan con intervención de expertos de la firma Chrysler, fabricante de la Cherokee. Ya se comprobó que la pintura que tenía el Galaxy, en el lugar del choque, era idéntica a la de la camioneta en la que iba Horacio Conzi la noche del crimen. También se sabe que de la Beretta nueve milímetros de Horacio Conzi partieron los 14 tiros, tres de los cuales determinaron la muerte de Eschenone. Anoche, en el entorno de los Conzi, nadie quería hablar sobre los rumores que indican que Horacio estaría pensando en entregarse. “Es inocente, pero lo quieren fusilar”, dijo un portavoz de Dallas. “Los periodistas tendrían que aflojar un poco porque nosotros queremos trabajar y si seguimos así vamos a tener que echar a los 180 empleados porque el negocio se está yendo a pique”, sostuvo el vocero de los Conzi.