Sábado, 13 de agosto de 2011 | Hoy
El fenómeno de oscurecimiento del cielo, en medio de la tormenta de ayer, se debió a la “dispersión” de los rayos de sol en las nubes de lluvia. Claudia Campetella, doctora en Ciencias de la Atmósfera de la UBA e investigadora del Conicet, explicó que lo ocurrido “es algo habitual” y sucede “porque la luz solar se dispersa al tener que atravesar un conglomerado de nubes tan grande”.
“La oscuridad es un evento no muy raro en el contexto de una tormenta. Siempre es repentino y momentáneo”, dijo Campetella. Y sugirió que lo que pudo haber llamado la atención es que este hecho “ocurrió al mediodía”, cuando más luz natural hay, entonces el contraste “fue más notorio” que si hubiese ocurrido en otro horario.
La especialista apuntó que “meteorológicamente (el fenómeno) no tiene un nombre”. Tan “sólo es la dispersión de la luz solar”, cuando las nubes tienen un “alto contenido de agua en estado líquido”. Eso dificulta el paso de los rayos solares y genera “un efecto” de oscurecimiento.
En otra línea, Campetella indicó que la tormenta de granizo de ayer se originó por el choque “de dos frentes, una masa de aire cálido proveniente del norte y otra masa de aire frío proveniente de la Patagonia”, y que esas condiciones pueden darse en cualquier época del año. “Ninguno de los fenómenos ocurridos está fuera de lo normal.”
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