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La Corte Interamericana de Derechos Humanos, el máximo tribunal del continente en la materia, hizo lugar a las medidas provisionales solicitadas por un grupo de abogados para que se garantice la vida de los 2 mil internos de la Penitenciaría de Mendoza. Las medidas provisionales son una disposición cautelar solicitada a través de la Comisión Interamericana de DD.HH., que está realizando una investigación sobre la cárcel, considerada como una de las más calamitosas en toda Latinoamérica (con su capacidad superada en un 280 por ciento). Un día antes de que la Corte hiciera lugar al pedido, otro preso fue apuñalado en el penal. Este diario ya informó sobre la grave situación por la que pasan no sólo los internos, sino un grupo de abogados de DD.HH., acusados gravemente por funcionarios del gobierno mendocino de Julio Cobos por haberse presentado ante los organismos internacionales después de que la Penitenciaría registre 11 muertos en 8 meses.