El presidente justificó su decisión alegando que Osetia del Sur y Abjazia deben ser protegidas de otras posibles agresiones por parte de Georgia. "Es la única posibilidad de proteger allí la vida de las personas", dijo Medvedev.

El mandatario ruso acusó al presidente georgiano, Mijail Saakashvili de "elegir el genocidio" para lograr sus objetivos políticos. Con el ataque de las tropas georgianas en Osetia del Sur el 8 de agosto, dijo, quedaron destruidas las últimas esperanzas de una convivencia pacífica allí y en Abjazia.

Medvedev adoptó la decisión durante una reunión del Consejo de Seguridad Nacional, integrado por los máximos responsables políticos y militares de Rusia, en su residencia de verano en Sochi, junto al Mar Negro.

El primer ministro Vladimir Putin estuvo también presente durante la sesión convocada para debatir la petición realizada este lunes por las dos cámaras del Parlamento ruso al presidente para que reconociera la independencia de las regiones separatistas georgianas.

El jefe del Kremlin llamó a los demás países a seguir su ejemplo reconociendo también a Osetia del Sur y Abjazia como Estados independientes.

Estados Unidos y numerosos países europeos habían advertido a Rusia en contra de un paso en este sentido. El presidente estadounidense, George W. Bush, rechaza la decisión y la considera ilegal respecto al derecho internacional.