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Un día después de que, sorpresivamente, el senador Carlos Reutemann se anotó como posible candidato a presidente para los próximos comicios generales, el ex mandatario riojano renovó sus aspiraciones a dar pelea por el Ejecutivo nacional.

"Como decía Perón cuando charlaba en Puerta de Hierro con Jorge Antón: 'a ese muchacho póngale una ficha'. Y bueno, yo les pido a los argentinos que me pongan una ficha para octubre del año 2011", convocó, en declaraciones a Cadena 3 de Córdoba. Menem salió primero en las elecciones presidenciales de 2003, pero al negarse a participar del ballottage, su contrincante y gobernador de Santa Cruz en ese entonces, Néstor Kirchner, fue ungido al frente de la Casa Rosada con 22 por ciento de los votos.

Ayer se supo que el senador, quien gobernó el país durante más de diez años, tendrá que prestar declaración indagatoria el próximo 9 de marzo en el marco de la causa por el supuesto encubrimiento que realizó en la causa AMIA, según determinó el juez federal Ariel Lijo.

Menem había sido citado a declarar en este expediente, pero nunca se presentó alegando razones de salud.

La misma actitud renuente tuvieron el ex jefe de la SIDE Hugo Anzorreguy y quien fuera su segundo en la central de espías, Juan Carlos Anchezar.

En medio de los reacomodamientos con vistas al año electoral que se avecina por cargos legislativos, y al igual que el político riojano, Reutemann rompió ayer su habitual hermetismo y admitió que "esta vez pensaría ser candidato a presidente, a diferencia de 2002 cuando dije no".

"Esta vez vale la pena", se ilusionó el ex gobernador santafesino, quien en aquel momento declinó la propuesta del entonces presidente Eduardo Duhalde a competir por el Sillón de Rivadavia, pese a la insistente prédica del ex cacique del PJ bonaerense.

En ese entonces, el ex corredor de Fórmula 1 pronunció una misteriosa frase para explicar su negativa a postularse a las presidenciales: "Vi algo que no me gustó", argumentó, enigmático, como toda justificación.