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El fiscal ante el máximo tribunal penal del país presentó hoy el recurso, mientras que durante la semana harán lo mismo las querellas y defensas de los acusados, con lo cual se iniciará formalmente el proceso para que falle la Sala III integrada por los camaristas Angela Ledesma, Liliana Catucci y Eduardo Righi. Tras las presentaciones, la ley fija 20 días de plazo para que los camaristas convoquen a audiencias públicas, donde se podrán defender las distintas posturas.

En un escrito de un centenar de carillas, el fiscal recomendó a Casación confirmar la sentencia de Chabán, rechazar su apelación y revocar las absoluciones de Callejeros, para quienes pidió se fije una pena por "estrago doloso". Pleé consideró además que los músicos debían estar al tanto de los sobornos que se pagaban a policías para obviar las violaciones a la capacidad máxima de público permitida en el lugar.

Además el fiscal entendió que los músicos decidieron tocar en Cromañón y tenían poder de voto en temas relacionados a la iluminación, seguridad y sonido, aspectos que no eran de exclusiva competencia de su manager, Diego Argarañaz, también condenado por el Tribunal Oral en lo Criminal 24.

En el dictamen, que no es vinculante, Pleé opina que el recital debió suspenderse apenas comenzado, por el exceso de público y el uso de pirotecnia y entendió que siempre se asoció esta última a los shows de Callejeros, algo que los músicos acompañaban. También sostuvo que desde el escenario se veía que la puerta de emergencia del local de Once estaba clausurada con candado, algo que los músicos pudieron haber advertido.

La sala III de Casación armó una secretaría especial para analizar la causa Cromañón y por estos días está abocada a acondicionar una sala en la planta baja de los tribunales de Retiro con miras a trasladar allí los centenares de cuerpos de la causa.

En el juicio oral, Chabán fue condenado a 20 años por "incendio doloso calificado por haber causado la muerte de 193 personas y lesiones a por lo menos 1432, en concurso real con el delito de cohecho activo en calidad de autor a la pena de veinte años de prisión, accesorias legales y costas". Por otra parte, Argarañaz recibió 18 años como partícipe necesario de incendio doloso calificado y cohecho activo, al igual que el subcomisario Carlos Díaz.