23:47 › LA PAMPA

Los represores prefirieron el silencio

Nueve de los diez ex militares acusados de cometer delitos de lesa humanidad durante la última dictadura, cuando formaron parte de la Subzona 14 que operó en esa provincia, se negaron a declarar en el marco del juicio que comenzó hoy en Santa Rosa. El décimo imputado y principal jefe del comando, fue dejado fuera del debate por enfermedad, aunque sigue vinculado a la causa.

Sólo dos de las 28 víctimas cuya participación está prevista en el juicio que lleva adelante el Tribunal Oral Federal de La Pampa por los crímenes de lesa humanidad cometidos en la provincia durante la última dictadura por miembros de lo que se conoce como "Subzona 14", declararon durante la primera jornada del proceso.

Nueve de los diez imputados, todos miembros del comando conocido como "Subzona 14", que operó en La Pampa durante la última dictadura militar, se negaron a declarar. Todos ellos permanecerán detenidos en celdas de la U4 mientras se extienda el proceso judicial.

En tanto, el décimo acusado, y máximo jefe del comando, el coronel retirado Fabio Iriart, fue dejado fuera del debate por el TOF, por "enfermedad".

La decisión del tribunal despertó el descontento de los familiares de víctimas, querellantes en el juicio y presentes en el recinto, que había solicitado que Iriart declarara via teleconferencia para no quedar excluido en el proceso.

En este sentido, el presidente del TOF, Mario Tripputi informó que por unanimidad habían resuelto excluir del debate a Iriart si bien no quedaba desvinculado de la causa.

Los únicos dos testimonios que se escucharon hoy fueron los de Saúl Santesteban, actual director periodístico del diario La Arena, quien fue detenido el 24 de marzo de 1976 y liberado en abril de ese mismo año, y que no reconoció a ninguno de los imputados sentados allí. El periodista estuvo a disposición del Ejecutivo Nacional y fue interrogado si bien no fue torturado.

"Me preguntaban si era fundador del partido Guardia Comunista, les dije que no militaba en ningún partido y me cuestionaban mis notas periodísticas donde criticaba las racias que hacían en los hospitales y universidades. Sembraron el terror y la idea de que quien estaba preso, algo habría hecho", aseguró.

A su turno Miguel Maldonado, de 62 años, hizo un relato conmovedor, confesando que fue víctima de golpes pero no de picanas y que "lo más terrible era escuchar el grito en otras celdas de los otros detenidos que habían sido llevados a tortura, se reían cuando torturaban, mi único pecado fue haber sido dirigente sindical, militaba en la Democracia Cristiana pero ellos decían que era comunista", señaló.

Maldonado comentó que entre los detenidos que vio durante su detención, estaba la hija del ex gobernador, Aquiles Regazzoli -Mireya-, también una de las testigos en éste juicio "quien me contó que la habían golpeado mucho", relató.

El juicio continuará mañana a las 9 y uno de los testimonios será el de Nelson Nicoletti, quien al momento de su detención era director del Diario La Capital y Secretario General del Sindicato de Prensa de La Pampa.

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