Acompañada por el gobernador de la provincia de Santa Fe, Hermes Binner, el intendente local, Miguel Lifschitz, y rodeada de empresarios de distintos sectores de la actividad económica, Cristina Fernández de Kirchner abogó para que el Bicentenario "nos sirva para hacer un balance que nos permita decidir qué país queremos, sin prejuicios ideológicos. Hay que pensar qué hicimos en estos 200 años y qué país queremos en el futuro". Afirmó estar dispuesta a sentarse con todos los sectores de la sociedad para discutir las necesidades de cada uno, "con los números sobre la mesa".

La Presidenta advirtió que "es preciso abordar el altísimo grado de informalidad que aún tiene el país", y recordó que para sostener a un jubilado se necesitan cuatro aportantes activos. "Sin cohesión social y una clase empresarial con fuerte responsabilidad no es posible crecer", afirmó.