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Cristina atribuyó la polémica por el discurso del vicepresidente de la UIA, Federico Nicholson a una "interpretación malintencionada de algunos que quieren ver peleas", aunque remarcó que "después de la crisis internacional del 2008 es imposible que alguien se autorregule en sus propios intereses y no lo haga el Estado en representación de toda la sociedad".

En ese sentido, ratificó que el Gobierno seguirá tomando las medidas necesarias para seguir "defendiendo el trabajo y produccion nacional". "Todos colocan el proteccionismo en la Aduana, pero también hay cuestiones fitozanitarias. Por eso tenemos una política activa como el resto de los países del mundo", aseveró Fernández, al clausurar la Conferencia Industrial Anual.

En ese sentido, la jefa de Estado reafirmó que la Argentina está dispuesta a participar de la Ronda de Doha, para discutir las nuevas reglas del comercio mundial, pero advirtió que "no estamos dispuestos a sacrificar el crecimiento de nuestra industria ni el trabajo generado".

En el inicio de su discurso, Cristina resaltó el "fuerte" vínculo establecido desde el 2003 por el gobierno nacional con los empresarios y la CGT: "Son los dos vínculos más fuertes que se dieron en un modelo económico que se instaló en el 2003", reflexionó.

En relación con la industria, CFK afirmó hoy que "desde 2003 a la fecha la actividad industrial ha crecido por sobre la actividad económica, en lo que se convirtió en el período más importante, sostenido y sustentable de los últimos 200 años de historia de la Argentina", y explicó: "Sostenido porque es su octavo año, sustentable porque se da con un modelo de variables macroeconómicas aplicadas por primera vez en nuetro país, superávit fiscal y comercial y desendeudamiento con características inéditas".

Por tanto, solicitó al Congreso Nacional que debata un proyecto de ley presentado por el Ejecutivo hace un año que favorece el desarrollo de la industria del software. "Por favor: si logramos tener sancionada esa ley va a ser un aporte a esa industria que viene creciendo y generando calidad en nuestros recursos", pidió Cristina.

Por otro lado, consideró que la inserción de un país en el mundo no se mide si "nos reciben con alfombra roja y nos aplauden", sino por las plazas que se conquistan, por qué y cuánto nos compran. "Ha crecido la interrelación de Argentina con el mundo, si se suman las importaciones y las exportaciones se alcanza los 36,5 millones de dólares, contra 12 por ciento de suma de exportaciones e importaciones durante la década del 90. Esa es la manera de medir la inserción en el mundo, no por si nos reciben con alfombra roja y nos aplauden", demostró la mandatria.

En una continuación con la puesta en conocimiento del público de las cifras de la economía argentina, CFK reiteró que la desocupación en el país es "del 7,5 por ciento en el tercer trimestre del año, frente al 9,1 registrado en el mismo período del 2009" y reveló las cifras de crecimiento acumulado de 9 por ciento durante los últimos doce meses, en una medición que corresponde a octubre de 2010. La Presidenta atribuyó esos índices a la aplicación de "políticas contracíclicas" que frenaron el impacto de la crisis internacional en el país.

Además, la mandataria sostuvo que "más y mejor educación, con más tecnologías" permitirán "más crecimiento y más y mejor trabajo en la Argentina". "No vamos a acumular rentabilidades por la vía de salarios degradados ni tampoco por la vía precios más altos; en el siglo XXI la rentabilidad viene producto de los acuerdos de todos los sectores, de los trabajadores y de los empresarios, con más educación y más innovación tecnológica", reflexionó.