En dos ocasiones, los manifestantes lograron cortar esa vía en la bajada de avenida Ramón Castillo y en ambas oportunidades fueron reprimidos. Pasadas las 11, llegó al foco de la protesta un funcionario del gobierno porteño que ofreció dialogar con cinco representantes de los manifestantes, pero los vecinos pidieron que primero cesen las balas policiales.

Desde el asentamiento ubicado en el barrio porteño de Retiro arrojaban piedras contra los agentes, que les disparaban persiguiéndolos hasta dentro de las calles de ese barrio. Más tarde llegó el delegado del Instituto de la Vivienda de la Ciudad (IVC), Alejo Maxit, para dialogar una salida al conflicto, a pesar de la intransigencia inicial del gobierno comunal.

Sin embargo, para Rodríguez Larreta, la protesta tiene "motivación política" y por ello la calificó de "apriete y extorsión". "No sé si hay una motivación política atrás, porque los acuerdos se vienen cumpliendo", subrayó a un canal de cable.

Un habitante de la villa, que se identificó como Sergio, explicó a Télam que piden al gobierno porteño "200 subsidios, trabajo y vivienda que queremos construir en el predio lindero a la autopista Illia y pagar por mes". Otra vecina llamada Mirta criticó que "los subsidios que reclamamos los dan dos meses y después los cortan, pero queremos que los extiendan a más personas y se mantenga en el tiempo". Además, advirtió si no se llega a un acuerdo "vamos a cortar con 500 familias".