Sábado, 22 de septiembre de 2012 | Hoy
17:35 › TRAGEDIA DE ONCE
Paolo Menghini, el padre de una de las víctimas del accidente en la terminal de Once ocurrido el 22 de febrero pasado, insistió con "la responsabilidad empresarial y de los funcionarios" en ese hecho en que murieron 51 personas y otras 700 quedaron heridas, y afirmó que la recusación que esta semana planteó la defensa de los exdirectivos de TBA contra el juez Claudio Bonadío pretende "anular" la causa.
El juez federal fue objetado por presunto "direccionamiento" de la causa y por no resolver la situación procesal de todos los acusados, lo que, argumentaron los defensores de Claudio Cirigliano y otros exdirectivos de la empresa, genera un perjuicio en su derecho de defensa.
Por esto, el padre de Lucas Menghini Rey, el joven cuyo cuerpo fue hallado un día y medio después del choque en la terminal de Once de la línea Sarmiento, sostuvo: "Lo que están haciendo todos los defensores de los imputados es trabar la causa y ensuciarla de todas las maneras posible".
"El objetivo final es la nulidad de este proceso cuando la responsabilidad empresarial y la responsabilidad de los funcionarios está absolutamente demostrada tanto en las pericias técnicas como en las contables, donde no se conoce el destino de 3.500 millones de pesos a lo largo de 17 años", advirtió el Menghini.
En su criterio, "todos los movimientos de los abogados de ellos, desde el primer día hasta hoy en estos siete meses, fue entorpecer todo lo posible". De hecho, las defensas de Claudio Cirigliano, exdueño de Trenes de Buenos Aires, y de otros exdirectivos de la empresa imputados por la tragedia, plantearon el recusamiento de Bonadio esta semana y, ahora, la Sala II de la Cámara Federal deberá resolver si aparta al magistrado o lo confirma al frente del expediente.
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