Fariña, quien está preso en La Plata por "evasión agravada", fue embargado por 35 millones de pesos, mientras que Elaskar quedó embargado por 27 millones. El juez dispuso embargar además acciones de tres sociedades sospechadas de haber intervenido en maniobras de lavado por medio de la financiera SGI, perteneciente a Elaskar, tras escuchar medio centenar de testimoniales que habrían dado por probado el vínculo entre los dos acusados.

Además, Casanello ordenó otras dos indagatorias, a Alejandro Bryn y a Mario Acevedo Fernández, financistas relacionados con los procesados, y solicitó la colaboración de los poderes judiciales de Panamá y Suiza.

Elaskar era el titular de la financiera SGI, también conocida como "La Rosadita", a la que el juez definió como una "cueva" a la que Fariña concurría asiduamente. El fallo analiza el alto perfil mediático de Fariña por su vinculación con Jelinek y otros personajes de la farándula, y subraya que incursionó en “actividades ilícitas”. El juez determinó que el lavado de activos se produjo sobre dinero de origen “ilegítimo”.