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La movilización de esta tarde partió desde Colón y Cañada, y llegó hasta la plaza San Martín con la lectura de un documento en el que se pidió, además, acceso a la información sobre la cantidad real de detenciones efectuadas por el cuestionado código de faltas, la aparición de Yamila Cuello, presuntamente secuestrada por una rede de trata; frenar la criminalización de jóvenes y trabajadores sexuales, y el cese de los procesos penales contra los usuarios de marihuana.

"Somos los pibes y las pibas de los barrios, de los bailes y las canchas, de las cárceles de todo el país. Somos las trabajadoras y los trabajadores que luchamos todos los días por la dignidad; que soportamos la explotación, el salario bajo y la represión de la cana cuando protestamos", remarcó el texto leído por los convocantes.

Además, criticaron que "con la excusa de contribuir a una sociedad más segura", el gobernador cordobés, José Manuel De la Sota, impone una política "de tolerancia cero" y lo calificaron por ello como "verdugo del pueblo cordobés".

Volvieron a exigir la derogación del Código de Faltas aprobado en 1994 bajo la gobernación de Eduardo Angeloz, que tiene por objeto "castigar conductas que perjudican la vida cotidiana". "¿Quién define las conductas perjudiciales? ¿Quiénes perjudican y a quiénes?", cuestionaron.

"La existencia de este aparato represivo genera un gasto público de más 8 mil millones de pesos anuales, en detrimento de la salud, la educación, el hábitat, el trabajo, al ambiente, las culturas y la recreación, entre otros derechos", criticaron.