La confirmación fue brindada por el juez federal subrogante Hugo Sastre, quien sostuvo que "se trata del médico Lisardo Iván Lois, que fue localizado en Ushuaia a quien se lo citó para el 30 de agosto en el marco de la investigación abierta".

El juez, quien reabrió la causa que estaba archivada con la intención de develar lo ocurrido en la guarnición militar hace casi 35 años, calificó como "muy importante" el aporte del médico que fue quien "llenó los certificados de los 16 muertos en el momento".

Sastre recordó que "tan paralizada estaba la causa que ni siquiera teníamos los certificados de defunción de las víctimas, tuvimos que rastrearlos, incluirlos en el expediente y luego buscar el paradero del médico que las firmó cuyo testimonio consideramos muy importante".

La justicia espera además tomar el testimonio del escritor Tomás Eloy Martínez, quien arribará a Chubut invitado por un diario local para una disertación, lo que "será aprovechado" confesó Sastre, quien lo citará para aportar datos.

Eloy Martínez es el autor de "La pasión según Trelew" y, de acuerdo con el magistrado, "da datos muy concretos" por lo que "sería necesario que acredite la fuente para que la investigación la podamos seguir con mas detenimiento".

A menos de un mes de cumplirse el 35 aniversario de la masacre, el juzgado local dio otro paso en la investigación de la causa: citó a declarar a Juan Carlos Valenzuela (48), hijo del guardiacárcel Juan Gregorio Valenzuela quien fue ultimado por los militantes de izquierda en la fuga del penal de esta capital.

Este último episodio ocurrió el 15 de agosto, una semana antes de la masacre, y la causa tampoco está cerrada por lo que "debemos unir un episodio con el otro, porque la fuga, la captura y la muerte de los recapturados en el aeropuerto de Trelew tienen relación entre sí".

Sastre aclaró que "el hijo de Valenzuela era muy joven cuando ocurrió (contaba con 12 años) pero es importante su testimonio" que fue tomado por el propio juez y el secretario Gustavo Lleral, quien lleva adelante la causa.

La justicia se apresta a recibir además un informe del Instituto Balseiro, con sede en Bariloche, cuyos técnicos peritaron las paredes de la celda en la base donde se produjeron

los disparos contra los presos para determinar el tipo de proyectil empleado y los impactos.

Según Sastre, la medida "fue requerida al área de físicos de ese prestigioso centro para determinar detalles de la balacera ya que, con el tiempo transcurrido y con las modificaciones de las paredes, hay que aplicar determinada tecnología que esperemos de resultado en este caso".

En la masacre de Trelew murieron los militantes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) Carlos Alberto Astudillo, Alfredo Elías Kohon y María Angélica Sabelli.

También murieron los militantes del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP) Rubén Pedro Bonet, Eduardo Adolfo Capello, Mario Emilio Delfino, Alberto Carlos del Rey, Clarisa Rosa Lea Place, José Ricardo Mena, Miguel Angel Polti, Ana María Villareal de Santucho, Humberto Segundo Suarez, Humberto Adrián Toschi y Jorge Alejandro Ulla.

La lista de las víctimas fatales se completa con los militantes de la organización "Montoneros", Susana Graciela Lesgart de Yofre y Mariano Pujadas.

De la balacera (a la que la marina justificó en un "intento de fuga") sobrevivieron Alberto Miguel Camps (FAR) y los militantes montoneros María Antonia Berger y Ricardo René Haidar, quienes con posterioridad pasaron a engrosar la lista de desaparecidos.