Garzón, militante de izquierda que ostenta el puesto político más importante del país luego del de presidente, propuso al gobierno nacional que le dé a Betancourt el estatus de negociadora, según indicó DPA.

Garzón hizo el pronunciamiento luego de que el gobierno colombiano catalogara de "paranoica" la denuncia de la senadora Piedad Córdoba, ex mediadora para un acuerdo humanitario con las FARC, en el sentido de que fueron manipuladas las pruebas de vida de 16 rehenes que se conocieron la semana pasada.

Las autoridades afirmaron que los testimonios de vida -entre los que figuran cartas, fotografías y videos de Betancourt, el ex senador Luis Eladio Pérez y de tres estadounidenses- habían sido decomisadas en una operación especial cumplida el jueves contra miembros de una célula urbana de la guerrilla en Bogotá.

En una entrevista que publicó este domingo el periódico mexicano El Universal, Córdoba dijo que las pruebas habían sido "escondidas" por el gobierno de Bogotá para hacer fracasar la misión que cumplió en París junto con el presidente de Venezuela, Hugo Chávez para entrevistarse con el presidente francés Nicolas Sarkozy.

Chávez pidió las pruebas de vida a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y varias veces expresó que confiaba en mostrarlas durante su visita a Sarkozy, muy interesado en el tema del posible canje entre rehenes y rebeldes presos, pues Betancourt también tiene nacionalidad francesa.

El alto comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo, dijo que la denuncia carece de validez, ya que las dos mujeres y el hombre que fueron sorprendidos con los documentos cayeron en poder de las autoridades el jueves pasado en la tarde y las pruebas se divulgaron en la madrugada del viernes.

"Ahí están los capturados. Esas son instancias que le corresponde a la Fiscalía aclarar, pero no se puede dar una interpretación paranoica, mostrando que había un complot. Eso es salido de tono y va en contravía de la realidad", dijo Restrepo a periodistas.

El abogado de los tres capturados, Luis Serrano, dijo que sus clientes fueron detenidos tras una llamada anónima al Ejército para alertar sobre la supuesta preparación de unos atentados terroristas.

"Lo que la defensa conoce es que la llamada fue una hora antes del arresto", dijo el abogado, aunque la Fiscalía sostiene que los "mensajeros" eran perseguidos desde hacía varios días.

La denuncia de la ex mediadora fue respaldada por la ex congresista Yolanda Pulecio, madre de Betancourt, quien visitó a Chávez en Caracas para agradecerle el trabajo que cumplió en busca del canje humanitario.

El gobierno considera que los detenidos no tenían la misión de entregar las pruebas para su divulgación, sino que las trasladaban para mostrarlas a algún jefe guerrillero, pues dentro del material incautado estaba la carta de un rehén a Jorge Briceño, alias "Mono Jojoy", uno de los integrantes de la cúpula de mando de ese grupo.