La "agrupación" de padres de estudiantes de Neuquén, que reclama el inicio de clases en esa provincia con una vigilia en las escuelas, negó hoy "cualquier vinculación" con el gobierno de Jorge Sobisch o con el gremio docente.

Daniel Sepúlveda, uno de los padres movilizados contra el paro, dijo que se trata de "padres con ganas de que sus hijos ejerzan su derecho a aprender, postergado por 40 días de paro, pero que no apoyan a ningún partido político, oficial u opositor, ni gremio".

En este conflicto "hay una parte que es el gremio y otra que es la de la política. Nosotros somos padres, no tenemos nada que ver con ninguna parte", agregó Sepúlveda en declaraciones a radio Continental.

Los padres se encuentran con sus hijos en distintas escuelas barriales "esperando a los maestros y directores para que empiecen a dar las clases", sostuvo.

"No queremos violencia", dijo Sepúlveda, quien añadió que de esta manera le están pidiendo "al gobernador hacer cumplir la ley para que los chicos puedan estudiar", para lo cual tienen previsto "hablar con el Juzgado de Menores".

En tanto, aseveró que esa agrupación de padres "entiende y acompaña" a la familia de Carlos Fuentealba, asesinado por la policía durante una protesta docente en la ciudad de Nuequén hace 15 días.

"Lo que queremos es que nuestros chicos estudien: el aumento se les dio, el duelo pasó, creo que ya está", sentenció, sin embargo, Sepúlveda.