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Macri

Realmente es patético y siniestro el discurso de Mauricio Macri sobre seguridad. La trampa en esto reside en discutir la cantidad de efectivos, el número de cárceles, la cantidad de menores que entrarán a un sistema penitenciario, donde serán fagocitados y transformados en verdaderos criminales, y no las verdaderas causas de este problema.

Para comprobar nuestra teoría vamos a citar un ejemplo. En el estado de Río de Janeiro existen varias policías: la civil, la militar, la federal, la judicial, la guardia civil (que tiene poder de represión) y de tanto en tanto el ejército, ¿saben cuál ha sido el resultado de tanta policía? Más delitos, más corrupción, más crímenes y más inseguridad.

Y la respuesta ante tal descalabro es fácil, nunca o casi nunca hubo por parte del Estado una respuesta concreta a las necesidades de los más pobres, a los negros, a los jóvenes, la gran mayoría sigue viviendo como animales, sin agua, sin educación, sin una vivienda digna y principalmente sin futuro. Y para alguien sin futuro caer en los brazos del delito es apenas un trámite.

No se trata de más policías, más armas y más tiros, se trata de menos racismo, menos violencia, más oportunidades, más escuelas de calidad, más salud y principalmente más futuro. Sin eso no lo habrá para nadie.

Fernando Falco
DNI 21.558.650

* Página/12 solicita a los lectores que las cartas enviadas no excedan los 15 renglones para posibilitar su publicación. De otra manera, será necesario cortar el texto original, con su consiguiente perjuicio.